Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

La UADY encuentra nuevos hallazgos de Cristóbal Colón

Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

La UADY encuentra nuevos hallazgos de Cristóbal Colón

Cristóbal Colón
Cristóbal Colón

Contrario a lo reportado en fuentes históricas, en la expedición que acompañó a Cristóbal Colón durante su segundo viaje para colonizar el Nuevo Mundo, además de hombres, se analiza la posibilidad de la presencia de mujeres y adolescentes, casi niños.

 

 

Esta hipótesis forma parte de un reporte de académicos de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) que en 2008 realizaron estudios en restos esqueléticos hallados en los años ochenta en la Villa “La Isabela”, al norte de la República Dominicana.

 Este lugar, como se sabe, lo fundó Colón en 1494 cuando realizó su segundo viaje al continente. Lo anterior, significó que La Isabela se convierta en la primera ciudad española del Nuevo Mundo.

La participación de Vera Tiesler, Pilar Zabala y Andrea Cucina, de la Facultad de Ciencias Antropológicas de la UADY, se debió a una invitación de Alfredo Coppa, investigador de la Universidad de Roma, La Sapienza, y también al apoyo brindado por el gobierno de República Dominicana.

 En su estancia los investigadores de la UADY realizaron estudios que concluyeron con la llamada parte macroscópica que abarcó restos esqueléticos de 44 personas hallados entre 1983 y 1991 en el cementerio de La Isabela.

Después limpiar y procurar por la conservación de los restos los especialistas de la UADY analizaron el material utilizando técnicas bioarqueológicas y posteriormente evaluaron la biografía mínima: sexo y edad.

Los resultados arrojaron que, además de los varones adultos, entre los tripulantes se presume la presencia de jóvenes, algunos menores de 20 años. Estas investigaciones revelaron también la potencial presencia de mujeres, entre cuyas osamentas hay una taina (indígena de la región) y otra de origen europeo.

 Asimismo, en la tripulación había, al parecer, hombres de origen africano que servían a los hidalgos o al propio Colón. Lo anterior, subrayaron los investigadores, contradice un poco el énfasis de que sólo hombres acompañaron a Cristóbal Colón en la fundación de la villa.

Con estos trabajos se logró una visión más completa de lo que fue el primer asentamiento español en el continente y su población, agregaron en una entrevista realizada en el Laboratorio de Antropología Esquelética de la Facultad de Ciencias Antropológicas.

Los estudios de los académicos abarcaron también el tema de las enfermedades sufridas por los conquistadores. Vera Tiesler subrayó que sorprendió la evidencia hallada de escorbuto (enfermedad general producida por la falta de alimentación de vitaminas, situación que ocasiona notoria debilidad de la energía muscular, manchas ulceraciones y hemorragias).

Poco antes, Andrea Cucina, quien años atrás trabajó en la Universidad de Roma La Sapienza, expresó que la participación de la UADY en este proyecto se planificó en 2006. Los restos esqueléticos se descubrieron hace dos décadas pero nadie los había tocado, afirmó.

Fue precisamente al trabajar en Roma que Cucina estableció contacto con investigadores de La Sapienza y que, finalmente, fue importante para concretar la presencia de la UADY en la República Dominicana.

En la charla los entrevistados destacaron la visión de la administración universitaria que tomó la decisión de apoyar la participación en el proyecto La Isabela. Hablamos de estudiar los restos de las primeras personas europeas que fallecieron en el continente, aseveraron.

Para los bioarqueólogos de todo el mundo este asentamiento es una inagotable fuente de conocimiento –subrayaron y agregaron que además los restos estudiados se estima que hay muchos más a pesar de que a principios del siglo XX el lugar fue objeto de destrucción.

Pilar Zabala Aguirre, historiadora española, con más de una década trabajando en la UADY, trabajó en situar el contexto histórico de la villa, dejando de lado la teoría de que todo lo que hacía Colón era improvisado.

 -Los reyes le encargaron aprestar 17 naves con unas mil 300 personas, entre trabajadores del campo, artesanos, carpinteros, albañiles, hidalgos, campesinos y religiosos -explicó-, el objetivo era crear una ciudad en esta parte del mundo.

El problema fue la que la villa solo funcionó cuatro años y después fue considerada, incluso, como un lugar maldito donde únicamente se refugiaban piratas, expresó.

Con base en la recopilación de información obtenida en archivos españoles la investigadora explicó que los tripulantes llegaron con severas carencias de alimentación y además trabajaron arduamente levantando grandes estructuras que, a la postre, los condenó.

 -Para obtener agua –dijo- los españoles tenían que recorrer un kilómetro para llegar a un río.

Zabala trabajó además en la reconstrucción de cuatro fatídicos años de la villa, azotada por incendios y huracanes. Después de su caída nadie, nunca más, habitó este lugar, reiteró.

Por último los académicos revelaron que los resultados de su trabajo serán presentados en la ciudad de Chicago, Estados Unidos, en el marco de la Conferencia de la Asociación Americana de Antropología Física. Y aseveraron que el trabajo continuará por mucho tiempo más.

 Con estos logros científicos, dijo Andrea Cucina, la UADY da un sólido paso en el proceso de internacionalización de la investigación. Con esta actividad la institución ganó mucho ya que se han colocado las bases para futuras relaciones con instituciones de prestigio mundial, añadió.

Para Pilar Zabala la investigación representó la oportunidad de ampliar los estudios que, desde luego, tienen aplicación en el área maya. Además, subrayó, debo decir que los trabajos históricos relacionados  con el final del siglo XV y los siglos XVI y XVII estaban olvidados, no sólo en México sino en todo el mundo.

Vera Tiesler manifestó su orgullo por participar en una investigación internacional. Destacó la visión del rector de la UADY al financiar un estudio de esta naturaleza. Difícilmente lo haría, por ejemplo, el CONACYT, añadió.

Poco antes de la entrevista los investigadores presentaron los resultados de su trabajo a directivos del plantel, encabezados por su titular Genny Negroe Sierra, y al rector Alfredo Dájer Abimerhi.

Las imágenes que ilustran este trabajo fueron realizadas por Fernando Luna Calderón, del Museo del Hombre Dominicano, de la República Dominicana.

Facebook
Twitter
LinkedIn