Naturaleza, tradición y aventura

Por Julio Leal Ortiz

Realizar turismo al interior de Yucatán es entrar en contacto directo con la naturaleza, es asombrarnos con las maravillas que nos aguardan entre la selva tropical y reconectarnos con nuestros orígenes culturales.

En un viaje reciente, gracias a la invitación de la agencia de viaje Trip MID, tuve la oportunidad de conocer dos paradores ecoturísticos localizados muy cerca del Pueblo Mágico de Valladolid, dentro de los cuales hicimos una introspección a nuestras raíces, el misticismo maya se apoderó de nuestros sentidos y al final, nos recargamos de buena energía.

Chichikán

La aventura en este parque consiste en un recorrido guiado donde realizamos diferentes paradas hasta llegar al cenote, a través del cual conocimos más sobre el estilo de vida de los mayas, sus costumbres, tradiciones y creencias.

Asimismo, nos deleitamos con un poco de chocolate maya, miel de abeja melipona, chicle maya y brindamos con el sabor milenario del Xtabentún. Posterior a esto, disfrutamos de un increíble espectáculo de danza en el teatro maya y además, nos dieron la oportunidad de atravesar la pelota por el aro en una recreación del Juego de Pelota o Pok Ta Pok, en maya.

Tras el recorrido de aproximadamente dos horas y después de descender 90 escalones, ahora sí pudimos refrescarnos y purificarnos en las cristalinas aguas del cenote Chichikán, en una experiencia revitalizadora y con un paisaje al cielo abierto como pocos en la Península.

Asimismo, cuentan con restaurante con el sabor de la auténtica comida regional para saciar tu apetito después de nadar.

Hubikú

En este parador turístico localizado en el municipio de Temozón pudimos decir ‘panza llena, corazón contento’, pues además de refrescarnos en sus increíbles aguas color turquesa, nos deleitamos en su restaurante, el cual ofrece servicio de comida bufete que incluye todas las delicias culinarias de Yucatán.

El cenote es de tipo semi abierto, en su techo hay un orificio por donde entra la luz del sol, dándole mucha magia al lugar. Para llegar, hay que bajar por 115 escaleras y desde cualquiera de ellas se puede apreciar perfectamente la belleza del lugar.

Además, si quieres calentarte la garganta cuentan con un museo del tequila, donde nos mostraron su proceso de elaboración y pudimos degustar de las variedades que ofrecen. De igual forma, cuentan con una tienda de artesanías por si quieres llevarte un pequeño recuerdo de tu estadía.

El turismo poco a poco regresa a la normalidad y con esto, debemos recordar lo afortunados que somos al contar con estos paradisiacos lugares muy cerca de nosotros.

¡No te pierdas la oportunidad de salir a explorar los rincones de la Península!

Parque Ecoturístico Chichikán: (999) 902-6005 / Hubikú: (998) 195-6537