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Holbox, el secreto mejor guardado de México

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Holbox, el secreto mejor guardado de México

Por Julio Leal Ortiz

Si pudiera describir a Holbox en tres palabras serían: paraíso en tierra. Un fin de semana fue suficiente para afirmar que este lugar es mi nuevo destino favorito de la Península.

Esta acogedora y pequeña isla se encuentra entre el Mar Caribe y el Golfo de México, sus hermosas playas y atardeceres, aguas poco profundas, la calidez de su gente, tranquilidad y magia, hacen de la experiencia algo verdaderamente paradisiaco.

Para llegar a Holbox desde Mérida tienes dos opciones: la primera es manejar hasta el poblado de Chiquilá y dejar estacionado tu carro en alguno de los aparcamientos que se encuentran ahí (con un costo de 100 pesos la noche); o bien, tomar un ADO que te puede llevar al mismo poblado. Una vez ahí, puedes cruzar en ferri o en una pequeña lancha pesquera, las cuales cuestan aproximadamente 200 pesos por persona.

Después de 25 minutos de navegar, ¡la magia comienza! Llegas al muelle de Holbox, en donde las opciones de transporte se limitan a tomar uno de los carritos de golf para llegar a tu hospedaje. Lo que nadie te cuenta es que en época de lluvias, las calles se inundan y el trayecto se convierte en una aventura de campo travieso… hasta tuve que bajarme del carrito, con el agua hasta las rodillas, para empujarlo con el chofer y así pudiéramos seguir avanzando.

Existen muchas opciones de hospedaje en la isla, desde hostales, airbnbs y hoteles; nosotros optamos quedarnos en el Hotel Boutique Soho, un espacio alejado del centro de la isla, muy tranquilo, hermoso y romántico.

Al día siguiente decidimos pasear por el centro de la isla, tan lleno de vida, murales, pequeños restaurantes, muchas opciones de aventuras y los mejores atardeceres; es ahí donde nos encontramos a un personaje que nos ayudó en todo nuestro viaje, un singular yucateco llamado Eladio, quien lleva viviendo en la isla por más de 20 años. Él nos estuvo transportando en su carrito de golf, nos dio un recorrido para conocer los puntos más bonitos de Holbox, nos llevó a observar el fenómeno de la bioluminiscencia y hasta nos consiguió comida cuando todo ya estaba cerrado; sin duda, se convirtió en nuestro gran amigo, por lo que no duden en contactarlo* cuando estén por ahí y de paso, ¡mándenle saludos de su amigo Julio!

Las opciones gastronómicas son muchas, pero yo les recomiendo visitar Mahi, Mantarraya y Roots, y como postre no puede faltar una tradicional marquesita en alguno de los puestos que se encuentran en la orilla de la playa.

Algo importante a considerar es que la señal de teléfono es muy escasa y el wifi es lento, por lo que si trabajas en línea será un desafío para ti, pero si lo que buscas es desconectarte de la ciudad, será perfecto.

Estoy esperando una nueva oportunidad para regresar a la idílica Holbox y así crear nuevas historias y recuerdos… les aseguro que es un destino que nunca olvidarán.

Mientras tanto… ¡sígueme en mis aventuras por México!

Instagram: @juliolealortiz

(*) Teléfono de Eladio: (984) 181 8280

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