Por José Luis Preciado.
Poco a poco la gobernadora Ivonne Ortega y la alcaldesa Angélica Araujo se van quedando solas en sus respectivos espacios. Van perdiendo poder y eso les duele mucho. En la Sesión Solemne de Cabildo con motivo del 470 aniversario de Mérida se vieron rasgos de esta triste despedida. Angélica pronunció su discurso de despedida para irse al senado -por cierto pelea con todo ser la primera-, allá estará seis años o menos si surge algo que le mueva el tapete y le convenga, mientras que la gobernadora Ortega Pacheco tendría que quedarse un tiempo más para ir cerrando cuentas, ver que cuadren, pues allí hay mucho hilo por jalar y encargando el gobierno a quien sería el interino -suena Cleominio Zoreda-, y de paso hacer amarres para la transición con Rolando Zapata a quien el PRI dan por ganador de la gubernatura.
En cuanto a la alcaldía de Mérida la moneda está al aire, más que convencerse con una buena campaña de Nerio Torres del PRI o de los panistas Beatriz Zavala o Renán Barrera, los meridanos calificarán con el voto al actual municipio, el día de las elecciones se sabrá exactamente el tamaño del descrédito o la aprobación de la obra actual ¿Qué efectos causó el acto violento del cuatro de julio en la glorieta, el concierto de Shakira, la obra del centro que hace el estado, pero que los meridanos consideran es del municipio de Mérida? ¿Qué otro tanto pesará la excesiva cercanía de los dos palacios? Todo eso determinará el resultado de las elecciones, la historia en el caso Mérida así lo demostrado. Si bien es cierto que el PAN es un partido por la mitad, también lo es el hecho de que los meridanos vean en los contrastes una forma de gobierno, así lo han hecho otras veces: alcaldía para el PAN y el estado para el PRI. Mientras tanto la gobernadora del estado es Ivonne Ortega y tendrá que jalar las riendas de sus funcionarios, ya muchos se están colocando en la mira del precandidato Rolando Zapata, incluso han dejado de asistir a las giras e inauguraciones con la gobernadora cambiándolas para hacerse visibles en la campaña del priista. Acuérdense la reina no ha muerto, sólo va soltando amarras, sin perder su norte que es Peña Nieto.
