Mérida, Yucatán, a 05 de marzo de 2012.- De 17 a 20 personas afectadas por descompresión, dos pescadores fallecidos, el riesgo de modificaciones severas al ecosistema costero e incluso la pérdida de especies marinas, son problemas asociados con la explotación del pepino de mar, sostuvo el director de Pesca estatal, Delfín Quezada Domínguez.

En entrevista con José Luis Preciado, el funcionario advirtió que el impacto de esa pesquería sólo podrá medirse dentro de dos años, sin embargo, ya es visible la problemática generada entre el sector pesquero debido a deficiencias en la regulación por parte de Conapesca.

Quezada Domínguez reveló que diariamente se reportan entre 17 y 20 personas con descompresión, debido a que el pepino de mar debe buscarse hasta 25 o 30 metros bajo el mar, cuando en años anteriores se encontraba a tan sólo cuatro metros de profundidad.

Detalló que los pescadores obtienen aproximadamente 40 pesos por kilo desviscerado, mientras que en el mercado local el intermediario compra en 500 pesos y entre los asiáticos llegan a pagarse cuatro mil pesos por libra; todo lo anterior, dijo, hace que se trate de una pesquería lucrativa a razón de la captura cotidiana de hasta media tonelada por embarcación.

El funcionario de la Secretaría de Fomento Agropecuario y Pesquero, señaló que el pepino de mar se comercializa principalmente en Asia y algunas zonas de Estados Unidos, donde la comunidad asiática tiene mayor presencia, ya que ese producto no se consume a nivel local.

Otro problema asociado con la explotación de esa especia, radica en la alteración del ecosistema, toda vez que el pepino de mar cumple una función de limpieza del lecho marino y su eventual escasez impactará en otras especies y la cadena alimenticia.

Para esta temporada, Conapesca emitió 57 permisos para 200 embarcaciones y fijó un límite de captura de 860 toneladas; asimismo, sólo permitió la captura los martes, miércoles y jueves.