Esta fue la penúltima jornada veraniega, los puertos lucieron llenos de visitantes, en Progreso se pudo mirar la llegada masiva de gente y por la tarde noche la vuelta a la ciudad. El próximo lunes habrá que volver a la escuela.
Para el resto del país ayer terminaron las vacaciones, por lo que los turistas nacionales que mantuvieron una muy buena ocupación de hasta el 74% de los hoteles, ya se marcharon. Ahora los hoteleros yucatecos dependen de la realización de congresos y convenciones, así como del “turismo médico” para concluir el año.
La afluencia a Progreso fue buena este fin de semana. No sólo se percibió ayer domingo, sino desde el viernes por la tarde. El cronista acudió a Dzemul y luego al puerto a cubrir unos eventos y al retornar por la costera y por la carretera hacia Mérida, el tráfico hacia esos puntos era notable.
“Prácticamente es el último fin de semana porque ya el próximo no vienen, bueno, vienen algunos, pero ya todos están metidos en el tema del regreso a las clases y muchos prefieren descansar en Mérida, por eso ya no salen”, dijo un prestador de servicios en el puerto.
Los restaurantes ubicados en el malecón reportaron buenas ventas, algunos no como las de otras semanas, pero nadie se quejó. Los precios de la comida se mantienen en 180 pesos para el kilo de mero y en 160 para el de otro tipo de pescados, aunque las especies de escama están escasas debido a que los pescadores andan metidos “en la pulpeada”.
Desde la semana pasada observamos el fenómeno de la escasez de peces, sobre todo del mero, y así se mantuvo este fin de semana. En contraparte, el precio del pulpo se mantiene por el rango de los cien pesos o un poco más, aunque estiman que se estabilizará en estos días.
Lo que ha destacado esta temporada en el puerto de Progreso ha sido el abandono en el que se encuentran los servicios públicos. La gente se quejó de la falta de presión en el agua potable, tema que no se ha concluido porque el Sistema Municipal sigue con problemas de cobros a los morosos y por lo tanto con dificultades para pagarle a la Comisión Federal de Electricidad.
La CFE ya ha cortado en dos ocasiones en lo que va del año el servicio de energía eléctrica a las instalaciones que bombean el agua al puerto, la más reciente en plena temporada, lo que causó muchas molestias a la gente.
Asimismo, la recoja de basura es ineficiente a raíz del conflicto que sostiene el Ayuntamiento con el Sindicato de Recolectores ya que las autoridades pretenden concesionar el servicio a otra empresa.
Progreso luce muy abandonado en varias de sus calles y colonias, lo que ha impactado en una imagen negativa del puerto, especialmente en esta temporada vacacional.
