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La memecracia

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La memecracia

La desinformación es la divisa con la que se viaja y vive en las redes sociales. Paradójicamente, ese medio constituye la principal fuente de noticias para amplios sectores de la sociedad, en especial el de los jóvenes. A raíz de los atentados del Viernes 13 en París, el Faceboook -en particular- se ha convertido en un hervidero de falsedades, verdades a medias y espacio propio del alarmismo. Y así, chavos, la neta es que no se puede seguir por la vida tan campantes.

guerraDos notas, que se han viralizado en los pasados días, llaman la atención por sus altos grados de maniqueísmo y manipulación informativa. La primera hace referencia a que ya inició la tercera guerra mundial, háganme ustedes el favrón cabor; y la segunda, habla acerca de la utilización que hizo una diseñadora francesa de unos diseños artesanales oaxaqueños, que los había patentado supuestamente, revuélvanme a hacer el favrón cabor.

Vamos por partes. Tan dados como somos los humanos a ver las cosas desde nuestra propia dimensión, sea esta religiosa o política o fanática-deportiva, dividimos al mundo entre los buenos bien buenotes y los malos malísimos súper villanos. A partir de eso, resulta fácil caer en el garito de quienes pretenden ganarse los “likes” a punta de noticias escandalosas pre-apocalípticas. Plagado de inexactitudes, datos retorcidos o de plano falsos, un texto que hablaba sobre el inicio de la tercera guerra mundial cundió por el FB. Incluso, personas de buena fe se lo creyeron.

Lo cierto es que el conflicto bélico que se desarrolla en la Península Árabe, de carácter geopolítico, dista mucho de ser un tercer enfrentamiento mundial, como las dos grandes guerras del siglo pasado. En primera instancia, debido a que los países involucrados combaten a un ente terrorista conocido bajo la etiqueta de Estado Islámico. El territorio de los enfrentamientos es Siria, como en su momento fue Afganistán con Al-Qaeda. Más que entre naciones, las intervenciones militares son contra posiciones de ese grupo radical que, dicen, organizó los atentados de París.

A lo largo de la historia reciente, podemos observar que esta no es la primera vez que varias naciones están en pie de guerra de manera simultánea. Basta decir que en la Guerra del Golfo Pérsico (1991), participó Estados Unidos y sus aliados; asimismo ocurrió con la invasión a Irak en la década pasada. Entonces nadie habló de una tercera guerra mundial, como ahora resultaría en un despropósito hacerlo.

En cuanto al caso de la diseñadora Isabel Marant, a quien se le acusó de haber patentado unos bordados artesanales, resulta que eso nunca fue verdadero. Lo que hizo la francesa fue utilizarlos para uno de sus modelos de blusa. Nada más. Acaso podría decirse que los plagio, aunque en lo personal dudaría mucho de tal aseveración. En última instancia, este sainete sirvió para darle realce a la belleza del trabajo de las manos oaxaqueñas que los crearon originalmente. Nunca estuvieron en riesgo de ser “privatizados” esos bordados.

Lo más interesante de todo esto, es que las cargadas, los linchamientos y los sucesivos arranques alarmistas, se propagan a partir de imágenes tipo “meme”, que se ha visto poseen la gran capacidad de anular el juicio y evitar que las personas se informen acerca de lo que realmente ocurre con ciertos temas.

Digo, siempre es más fácil dejar que otros piensen por nosotros. Estamos ante lo que podría llamarse la “memecracia”. En fin, es cuanto les cuento.

Por Alejandro Pulido Cayón

En Twitter: @alexpulidocayon

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