Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

Incendio devasta la única granja de pulpos

Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

Incendio devasta la única granja de pulpos

280810pulpo-incendio-granjaSisal, Hunucmá, Yucatán, a 28 de agosto de 2010.- “Por ahora somos la comidilla del pueblo, todos festejan que las pulperas estén momentáneamente en el suelo, pero nos levantaremos. Nada ni nadie detendrá la primera granja de pulpos del mundo, cuyos beneficios serán incluso para las familias de aquellos que hoy se regocijan con nuestra desgracia”, recalca Silvia Canul Pardenilla, presidenta de la cooperativa Moluscos del Mayab.

Hace 48 horas, un incendio (cuya causa aún está en investigación) devastó la primera granja de pulpos del mundo. Aún están las cenizas regadas en la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación de la UNAM cuando el presidente de la Fundación Produce Yucatán, Pedro Cabrera Quijano, aucdió a patentizar su solidaridad con las integrantes de la cooperativa.

Produce Yucatán, instancia que canalizó recursos a la investigación, validación y transferencia tecnológica de esa granja de moluscos, se comprometió a realizar las gestiones que sean necesarias para la inmediata recuperación del proyecto. Cabrera Quijano dijo a las afectadas que toda adversidad se debe ver como un reto a superar, una oportunidad para mejorar lo hecho.

A las 00:15 horas del pasado jueves, un vigilante de la UMDI de Sisal olfateó humo y de inmediato acudió a la zona afectada. Desde afuera, no vio fuego en una primera revisión, pensó que el siniestro estaba en un segundo iglú del complejo universitario. Cuando regresó a la incubadora de pulpos, el fuego había subido de intensidad, así que llamó a un segundo vigilante. Con extintores, ambos intentaron sofocar las llamas. Fue inútil, por el tipo de material, PVC y fibra de vidrio, el siniestro consumió cinco años de investigación en unos minutos.

Con el fuego, quedaron calcinados 14 mil pulpitos recién nacidos y 30 nodrizas. 500 moluscos fueron rescatados y llevados a los estanques; esos sobrevivientes son la esperanza de las mujeres de Sisal. Ellas están empeñadas en demostrar que sí se puede establecer la primera granja comercial de pulpo rojo yucateco, tamaño miniatura, que ya solicita el mercado nacional e internacional de la alta cocina.

Desde hace varias semanas, los pobladores de esta comisaría de Hunucmá reportan constantes altibajos en el servicio de electricidad. Por eso, las mujeres no objetaron la explicación de los bomberos: “El fuego se originó por un corto circuito”. Según esa primera inspección, se sobrecalentó el equipo de enfriamiento de la incubadora de pulpos.

Una duda queda en las mujeres, ¿accidente o fuego intencional? Ellas se han enfrentado a la oposición de vecinos y autoridades desde hace un lustro. Por ejemplo, justo enfrente de la zona devastada por el fuego, luchan por la propiedad de un terreno de una hectárea; ahí establecerían la granja comercial de pulpos pero el lote fue invadido hace dos meses.

“A una semana de dejar el comisariado municipal, las anteriores autoridades metieron maquinaria pesada en el terreno, destruyeron un manglar y enterraron un ojo de agua natural. Lotificaron y vendieron el terreno. Según ellos, Sisal necesita más vivienda, no una granja de pulpos”, dice Silvia Canul.

En ese caso particular ya intervino la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente, pues gracias a que las mujeres llevan un pormenorizado registro fotográfico, se documentó ampliamente la destrucción ecológica.

Empero, a partir de esta semana, ellas llevarán su lucha al plano legal: “Estamos dispuestas a defender con la vida este terreno. No permitiremos el despojo”, apunta Genny Uicab Novelo, otra de las mujeres de la cooperativa.

Ellas piensan en el futuro de la pesca. Por eso, no comprenden a qué se debe tanta oposición a un proyecto económico, social y ambiental que ya demostró sus potenciales en muestras gastronómicas nacionales e internacionales, una alternativa viable para la creación de fuentes de empleo y recursos económicos sustentables para Sisal.

“Ahora, por ejemplo, todos están locos por sacar el pepino de mar. No se dan cuenta que esa especie se encarga de limpiar el fondo marino. Cada vez hay menos pulpo y especies de escama en el mar porque están depredando un eslabón importante del ecosistema, pero no lo entienden, no ven más allá de sus narices”, indica Uicab Novelo.

Su compañera Silvia Canul, abunda: “Nos han cerrado las puertas en la cara. Nos han negado permisos. Nos hicieron dar una y cien vueltas por el terreno. Nos invadieron ese terreno. Hoy, nuestros animalitos están muertos. Ya lloramos todo lo que había que llorar, ahora estamos dispuestas a luchar hasta donde sea posible para concretar nuestro sueño”.

-En el pueblo se ríen de nosotras. Nos dicen, «¿cuándo verán su granja?, ¿en 20 años?, ¡ya estarán con bastón! Y les respondo que, con la ayuda de Dios, con ese bastón enrollaré a los pulpitos que darán empleo y recursos económicos a sus hijos -finalizó Genny Uicab.

Facebook
Twitter
LinkedIn