Dos conocidos empleados públicos de este puerto fueron detenidos el fin de semana y consignados al Ministerio Público acusados de presuntamente agredir a golpes a un policía municipal en el centro de la ciudad, porque el agente les negó el paso a una arteria que estaba cerrada por un evento religioso.
Los dos detenidos son Edgar Barragán Solís, de 38 años y empleado de Obras Públicas del Ayuntamiento, y Gaspar Núñez Martínez, de 33 años y empleado del Instituto de Becas y Crédito Educativo del Estado de Yucatán (Ibecey), también conocido comerciante de machacados de este puerto.
Ambos son conocidos en Progreso, pues han laborado en varias administraciones municipales. Barragán actualmente labora como empleado general en la Dirección de Obras Públicas y, según trascendió, está de vacaciones. Gaspar Núñez laboró en el Ayuntamiento la administración anterior y en la actual se unió al equipo de trabajo del Ibecey, que encabeza María Ester Alonzo Morales.
Altaneros y prepotentes
Los dos conocidos empleados públicos, según la Policía, no estaban ebrios, pero se comportaron de forma altanera, prepotente y violenta en contra del agente municipal que les informó que no podían transitar por la calle 31con 74, debido a que había una procesión religiosa y no podían entrar a la arteria.
De acuerdo con el informe policial homologado de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito (DSPT) de Progreso, la detención de ambos sujetos se llevó a cabo a las 18:25 horas del viernes 18 de abril pasado, cuando juntos agredieron a un elemento policiaco y se desconoce por qué el hecho fue informado apenas el lunes.
El reporte oficial señala que ambos sujetos insistían en pasar por dicha vía y en determinado momento Barragán Solís bajó del automóvil marca Nissan, tipo March, color gris, placas ZAR-77-02 del estado de Yucatán (propiedad de Gaspar Núñez), y amenazó al elemento policiaco.
No sabes con quién te estas metiendo
«Somos personas influyentes, no sabes con quién te estás metiendo», habrían dicho los dos sujetos al policía municipal, a quien incluso le advirtieron que perdería su trabajo si no los dejaba pasar.
El policía les explicó de nuevo que no era posible darles acceso ya que en ese momento estaba saliendo la gente que había asistido al servicio religioso. Al escuchar esto Barragán Solís se comportó de manera impertinente e intentó agredir al uniformando lanzándole un golpe con el puño.
El policía logró evitar la agresión e intentó someter a Barragán Solís, lo que propició que Núñez Martínez bajara del vehículo y sin mediar palabra golpeó con el puño derecho al oficial, ocasionándole una ruptura del pómulo derecho de aproximadamente cuatro centímetros. Luego entre los dos continuaron golpeando al agente.
Intentó darse a la fuga
Al notar que más elementos policiacos se aproximaban al lugar, Núñez Martínez se dio a la fuga a bordo del vehículo, dejando a Barragán Solís forcejeando con el uniformado. Se implementó un operativo de búsqueda y se logró su detención en calles del fraccionamiento Héctor Victoria, en el poniente del puerto de Progreso.
La Policía informó que ambos fueron trasladados a la cárcel de esta dirección y posteriormente turnados a la 11ª agencia del Ministerio Público, acusados de la comisión de posibles hechos delictuosos.
