La Policía Municipal se encuentra en el ojo del huracán, debido a que una persona que detuvieron el 19 de enero y lo consignaron a la agencia 11 de la Fiscalía Estatal, falleció en el hospital O’Horán por traumatismo cráneoencefálico.

El occiso, que falleció la semana pasada y estaba en calidad de desconocido, fue finalmente identificado como José Luis Otero Huerta, al parecer se dedicaba al narcomenudeo en este puerto, fue detenido por policías municipales que después lo pusieron a disposición de la Fiscalía Estatal. Lo recibió el agente Miguel Loera Tun.

El detenido presentaba golpes, en las celdas de la Fiscalía se comenzó a sentir mal, lo que le llamó la atención a la guardia y lo trasladaron al hospital O’Horán, donde finalmente falleció por los golpes en la cabeza.

El caso de presunto maltrato policiaco de un detenido, a manos de uniformados municipales, trascendió en este puerto aunque la defunción se dio en un hospital de Mérida, los agentes involucrados en el caso fueron citados a declarar a la Fiscalía.

También se investiga la muerte de otro detenido por la policía municipal, del que se ignora su paradero, las pesquisas van adelantadas.

Trascendió extraoficialmente que el pasado lunes una persona fue detenida por los municipales, el sujeto presentaba lesiones cuando lo aprehendieron, pero al parecer se les escapó y aún no lo ubican.

Por medio del vocero de la Policía Municipal se pidió la opinión sobre el caso del comandante Pablo Antonio Pech Pech, director de la corporación, pero no hubo respuesta.

Por otra parte se informó que la Fiscalía está integrando la averiguación para determinar si hubo alguna responsabilidad de los agentes de la Policía Municipal, en el primer caso.

De acuerdo con el parte de la corporación municipal, Otero Huerta, originario de Querétaro, con un amplio historial delictivo, durante una persecución se cayó y se golpeó la cabeza contra el pavimento, lo que le habría ocasionado la herida le causaría la muerte.

La versión de los agentes es apoyada por un supuesto testigo, víctima del ladrón.

Aunque trascendió que la mortal herida en la cabeza habría sido con las llamadas macanas para que confesara una serie de robos ocurridos en el puerto, sin embargo, a los oficiales se les habría pasado la mano.

La Fiscalía confirmó que el caso se está investigando por hechos posiblemente delictuosos.

Además se supo que cuando los agentes municipales pusieron a disposición del Ministerio Público al ahora occiso, su estado de salud era grave, por lo que fue ingresado al hospital O’Horán sin embargo, murió.

El año pasado, Otero Huerta, de 37 años, estuvo involucrado en por lo menos seis robos a casa-habitación y negocios del puerto, sin embargo, al ser consignado ante el juez lo dejaban en libertad por falta de elementos.

A principios de enero fue detenido en flagrancia cuando salía de robar en un negocio, el sujeto estaba borracho y drogado, por lo que fue puesto a disposición del Ministerio Público y a su vez fue remitido ante un juez de control.

El juzgador tras analizar el caso y determinar que la cantidad del hurto era mínima negó como medida cautelar la prisión preventiva y en su lugar dictaminó que acudiera a firmar la primera semana de cada mes, que no se acercara a la víctima, ni a su negocio y que no podía salir del estado sin autorización.

Dos semanas después de su detención murió de manera por demás extraña. La causa ya se investiga y una de las hipótesis es abuso de autoridad y tortura.