Por José Luis Preciado
Mérida, la más noble, leal y segura, fue sede de la plenaria de los senadores del PRI y de su rémora, el Verde Ecologista. Aquí se acordó impulsar las leyes secundarias de todas las reformas aprobadas el año pasado, los tribunos coinciden, el presidente Enrique Peña y su gabinete ya no tienen pretexto para impulsar el desarrollo del país y llevarlo al terreno de la utopía.
Sin embargo todo fue tan contradictorio, como es justamente la política mexicana, un ejemplo claro, el impulso de la leyes energéticas con todo y sus leyes secundarias y escuchar a Pedro Joaquín Codwell, secretario de Energía decir que no bajará la gasolina y que el tren transpeninsular y su ruta de Mérida a Punta Venado, llevará gente en el día y por la noche transportará combustibles, para luego decir que se construirá un gasoducto de Progreso a Cancún, al final uno queda enredado en medio de los aumentos de combustibles y la caída de la economía mexicana.
En relaciones exteriores, vamos a vender a México
El canciller José Antonio Meade ante los senadores del PRI cerró la plenaria exponiendo una estrategia para desplegar la imagen de México en el exterior, según la cual, se trata de un país en paz, con reformas, incluyente y próspero, que ha logrado reducir la violencia, combatir la impunidad y hacer que prevalezca la justicia. El funcionario presentó el decálogo que define cómo vender a México como “marca-país” y que consiste, precisamente, en que México es una democracia estable. México está de pie y es un país con reformas que le permitirán ser un actor con responsabilidad global.
Meade Kuribreña se reunió con la plenaria de la bancada priista -encabezada por Emilio Gamboa- en donde se explicó la relación con los demás países y se habló del tema de inmigrantes, así como de la próxima visita del presidente Barak Obama a México.
Por lo demás, cada secretario dio un parte informativo ante senadores, independientemente de impulsar leyes secundarias, los más importante ahora es la liberación de los recursos federales para que este país pueda operar, mientras soñamos con eso de que las reformas nos harán salir del bache.
