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Bienvenidos los ubernautas

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Bienvenidos los ubernautas

Por Alejandro Pulido Cayón

Fue hace más de una década cuando los agremiados al Frete Único de Trabajadores del Volante, capitaneados entonces por Nerio Torres Ortiz, enfrentaron una cisma producida desde el poder mismo. En un momento coyuntural, cuando gobernaba Patricio Patrón Laviada, se vio la oportunidad de mermarle fuerzas a esa agrupación de taxistas, famosa por su filiación y combatividad priista. En esa época supieron reinventarse, se volvieron más competitivos de frente a las cooperativas que surgieron como hongos. Hoy, la historia y el reto es diferente: los del FUTV se enfrentan a la innovación tecnológica y social que representa Uber.

Uber es una plataforma que permite enlazar a un conductor certificado, que cumple ciertos requisitos y perfil, con los usuarios que requieren de un transporte. Con base en una aplicación descargable en smartphones, los interesados en el servicio solicitan el vehículo y son llevados hasta su destino, con la noción de cuánto será la tarifa máxima, quién es la persona que les traslada y el seguimiento en tiempo real de la ruta que se sigue hasta el destino. Esta empresa, con presencia en la Ciudad de México, Puebla, Guadalajara y Guanajuato (donde tuvieron severos problemas), anunció la semana pasada que iniciará operaciones en Mérida.

taxi-2La primera reacción de los taxistas locales, léase FUTV, consistió en lanzar con bombo y platillo, batucada y batazos incluidos, lo que será su aplicación para competir contra la empresa transnacional. Bajo el nombre “Mi taxi Yucatán” (nótese la connotación localista de tonos xenofóbicos), el actual dirigente de los ruleteros, Héctor “Billy” Fernández Zapata, explicó en qué consistiría el servicio, que de entrada contará con 200 unidades “tecnologizadas”; además, a manera de velada amenaza, enfatizó que sus agremiados son legales y tienen sus papeles en regla, conforme a la Ley de Transporte estatal, además que están monitoreados por la Secretaría de Seguridad Pública (bueno, falta que los monitoreen en la dirección de Transporte, yo no más digo).

El joven periodista Paul Antoine Matos, de La Jornada Maya, publicó una sucinta crónica de su experiencia con “Mi taxi Yucatán”. En resumen, se observa que la oferta lanzada por el FUTV está muy lejos de ser competitiva con lo que ofrece Uber. Debido a la poca disponibilidad de unidades, una aplicación que parecería en fase beta, deficiencias en la capacitación de los operadores y, en fin, que se trata de una mala imitación. Entre el gremio de taxistas locales, lamentablemente, prevalecen vicios de décadas, que, en muchos casos, los han hecho abusivos con los usuarios. Mientras eso no cambie, de nada les servirá la tecnología. Necesitan innovación social, antes que nada.

En mi experiencia, he utilizado Uber en la Ciudad de México, Puebla y Guadalajara. En todas las ocasiones, ha sido notoria una mayor y mejor calidad del servicio en comparación con los taxis “normales”. Así las cosas, vaticino que en las siguientes semanas veremos algunos enfrentamientos como en otras ciudades donde empezó a trabajar la gente de Uber. Espero estar equivocado y que prevalezca la civilidad y sana competencia. Finalmente, Yucatán es tierra de gente buena y de paz, ¿o no? Es cuanto les cuento.

En Twitter: @alexpulidocayon

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