TEGUCIGALPA (EFE).— Maestros y médicos del sector público de Honduras levantaron ayer el paro que iniciaron el pasado 30 de mayo para exigir la derogación de dos decretos asociados a los servicios de educación y salud para dialogar con el gobierno que preside Juan Orlando Hernández.
La Plataforma por la Defensa de la Salud y la Educación confirmó en un comunicado que médicos y maestros retornaron ayer a sus labores.
La Plataforma indicó que a partir de ayer médicos y docentes se reunirán una hora al día para establecer las condiciones que permitan atender el llamado al diálogo promovido por el gobierno y el Comisionado Nacional de Derechos Humanos, Roberto Herrera.
Médicos y maestros comenzaron el 30 de mayo un paro indefinido para exigir al gobierno la derogación de dos decretos que consideraban lesivos a sus intereses, lo que el Ejecutivo aprobó el pasado domingo en un Consejo de Ministros.
Los manifestantes aseguraron que la Plataforma queda “articulada de manera indefinida para la defensa de los derechos de Salud y Educación” y reafirmaron que acudirán al diálogo si el gobierno cumple sus demandas, entre ellas que sea transparente y retransmitido por la televisión local.
El diálogo, que se prevé iniciará el próximo martes, se manifiesta “con graves amenazas de muerte” mediante amenazas de audio y de texto contra la presidenta del Colegio Médico de Honduras, Suyapa Figueroa, y otros directivos.
La Plataforma por la Defensa de la Salud y la Educación responsabilizó al gobierno de Hernández por “cualquier atentado contra la vida e integridad personal y familiar” de sus directivos y por la “evidente omisión del deber de investigar y proteger los derechos humanos de la población”.
Los directivos de los manifestantes analizan el desarrollo y las condiciones de las negociaciones con el fin de determinar el momento de su incorporación al mismo, con el objetivo de “construir el Plan Integral para el Fortalecimiento del Sistema Nacional de Salud y Educación de Honduras”.
Las protestas violentas continuaron entre el lunes y martes con actos de vandalismo, saqueos y enfrentamientos con la Policía Nacional, pese a que el gobierno hondureño derogó el domingo los decretos que causaron el conflicto.
La empresa estadounidense Standard Fruit de Honduras, subsidiaria de Dole Food Company, informó el martes de la suspensión de los contratos de al menos 3,000 trabajadores debido a las protestas violentas, que dejaron al menos una treintena de contenedores de la compañía quemados en el departamento de Colón, en el Caribe del país.
El principal gremio empresarial de Honduras expresó el martes su preocupación por la crisis en el país debido a las protestas e instó al gobierno y los manifestantes a “poner un alto” a las confrontaciones.
El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) cuestionó además “la tardanza” del gobierno para derogar los decretos ejecutivos, así como la insistencia de maestros y médicos por no asistir al diálogo.
De un vistazo
Piden mediación internacional
Médicos y maestros de Honduras, que ayer levantaron un paro de seis días, aseguraron que no existen las condiciones mínimas para iniciar un diálogo directo con el gobierno y exigieron la mediación de un experto internacional para facilitar el proceso.
Con comitiva
El gobierno que preside Juan Orlando Hernández comenzó un acercamiento con al menos una decena de representantes de organizaciones de maestros.
