«¿Qué te trajo el Niñito Jesús?» es una de las frases que se escucha en Navidad. ¿A ti quién te daba regalos niño, Santa Claus o él?
¡Ya se acerca la Navidad! Con ello, también se realizan una gran cantidad celebraciones tradicionales relacionadas con el nacimiento de Jesús, que en México es apodado con cariño con el sobrenombre de “Niñito Dios”.
La veneración del Niñito Dios en México data del siglo XVI, tras la Conquista. Entre las principales tradiciones se encuentra que cada familia tenga una o más figuras propias, mismas que serán presentarán en el templo durante la Nochebuena. Para dicha fiesta es costumbre quitar las ropas del ícono y envolverlo en pequeñas cobijas, pues tras la misa de gallo la figurilla será arrullada, simbolizando su nacimiento. Es común que la adoración se acompañe de villancicos y encendido de luces de Bengala, símbolo de la luz divina y la estrella de Belén.
Finalmente, tras arrullar el ícono religioso, éste pasará a ser parte del nacimiento o belén de cada hogar. La tradición estricta dicta que debe permanecer en dicho lugar hasta su próxima fiesta, el 02 de febrero, Día de la Candelaria.
Las tradiciones relacionadas con el Niñito Dios son de las más arraigadas en México, pues los pueblos prehispánicos ya solían hacer uso de ídolos con volumen para representar a sus divinidades. Sin embargo el culto no se reduce a ello, pues también existen otras celebraciones de carácter artístico como lo son las pastorelas, cuya primera versión fue La adoración de los Reyes Magos, escrita en náhuatl por fray Andrés de Olmos. Posteriormente, fray Juan de Zumárraga, primero obispo novohispano, reconoció las pastorelas como una forma de evangelización y de internalizar la devoción por el Niñito Dios entre los indígenas.
Niñito Dios o Divino Niño; el Niño Jesús dador de regalos de Navidad
Una de las tradiciones que más llaman la atención es la ilusión creada por los padres de familia de que el Niñito Dios reparte regalos durante Navidad o Día de Reyes.
La tradición tiene dos orígenes: el primero de ellos es el pasaje bíblico en que los magos asisten a adorar con regalos al niño Jesús. Como consecuencia de su bondad y origen divino, el Niñito Dios compartiría dichos regalos con los otros infantes. La segunda es una emulación de San Nicolás o Santa Claus, un religioso del siglo IV que compartió sus vienes con los huérfanos. El hecho de que sea Jesús quien reparte los regalos en las festividades se trata de un fortalecimiento de la celebración del nacimiento de Cristo.
Por ello, es común escuchar en algunas regiones de México la frase “¿Qué te trajo el Niño Jesús?”
El Niño Dios de la rosca de Reyes
Asimismo, otra de las costumbres que acompaña al Niñito Dios es la de la rosca de Reyes, celebrada unos días después de Navidad. En esta fecha se celebra que el Niño Dios fue adorado por los Reyes Magos, los animales y todos los que llegaron a verlo y a entregarle obsequios.
La tradición data del siglo XVII en Francia, época en la que a la rosca se le introducía una haba. Actualmente es común esconder un Niñito Dios de plástico en el pan, símbolo de la huída de la Sagrada Familia a Egipto para salvar a Cristo de Herodes. Quien encuentre el muñequito, será responsable de la celebración del Día de la Candelaria con tamales y el nuevo ropaje del niño.
Con información de México Desconocido
