Con la participación de casi veinte expositores y la puesta en venta de alrededor de diez mil títulos, ayer por la tarde-noche concluyó la LXVI Feria Municipal del Libro, que se llevó a cabo en los bajos del Palacio Municipal.

Como en toda feria, algunos comentaron que en esta ocasión la venta de libros no alcanzó los niveles esperados, tal vez por las compras navideñas, las lluvias que cayeron la semana pasada, entre otros factores, sin embargo, eso no significa que los participantes vayan a declinar en su objetivo de promover la lectura entre los habitantes de esta ciudad.

El representante de la editorial Bunix Club, Edgar Torres Martínez, señaló que los libros son la fuente principal del conocimiento aun en esta era digital y en los 13 años que tiene participando en ese evento, consideró que la edición que culminó ayer fue ligeramente satisfactoria.

Nuestra meta, agregó Torres Martínez, es ofrecer al público una gran variedad de títulos y los mejores precios, porque la lectura de un libro agudiza los sentidos de la vista, del tacto, del olfato, así como también despierta emociones que hacen pensar, soñar y crear.

Por su parte, de ediciones Geo, Geonany Gamboa Manzanero, dijo que los primeros días las ventas fueron bajas, tal vez porque estuvo lloviendo durante tres días, pero los días posteriores a las lluvias, las personas acudieron a visitar la muestra.

Por cierto, comentó que los libros de gastronomía, arquitectura y las enciclopedias, fueron las de mayor demanda en el último día de la feria, que en esta ocasión fue el marco para homenajear al escritor Carlos Peniche Ponce y que por falta de espacio no fue posible exhibir mayor cantidad de libros.

La Feria Municipal del Libro estuvo 10 días. Inició sus actividades en 1984, en una acción conjunta entre el Ayuntamiento de Mérida y la Asociación de Editores y Libreros de Yucatán “Raúl Maldonado Coello”, A.C. En esta ocasión reunió a 17 editoriales y librerías que ofertaron más de 10 mil títulos con variados descuentos.