Desde el 21 de julio el Seguro Social cambió la incapacidad por maternidad para ciertos casos y a partir de esa fecha las mujeres tendrán la opción de elegir atenderse con un médico particular y transferir semanas de descanso posteriores al parto.

Sin embargo, estos cambios se aplicarán a mujeres que no tengan complicación alguna durante el embarazo y que sus actividades laborales no impliquen riesgo para ellas o los bebés.

Según la información disponible en el sitio web del IMSS, para poder transferir el control del embarazo con un médico privado es necesario acudir por una sola vez cualquier día dentro de la semana 34 de gestación dictaminada por el galeno, a fin de que se expida un certificado único de Incapacidad por maternidad.

Se piden como requisitos llevar identificación oficial vigente con fotografía, cualquier documento en el que se encuentre el número de seguridad social, ultrasonido con una antigüedad no mayor a 5 semanas.

Se podrá transferir de una a cuatro semanas del período previo al parto; para el posterior es necesario llenar la solicitud de transferencia de semanas (en dos originales), contar con el consentimiento del patrón y autorización del médico familiar.

La expedición del certificado único de incapacidad será hasta por 84 días, que ampara el período prenatal y postnatal.