Mérida, Yucatán, a 09 de mayo de 2012.- En un escenario ideal, el embarazo debe planearse con un mínimo de tres meses de anticipación, ya que se deben tener en cuenta varios factores antes, durante y después del embarazo para que la vida de la madre y su hijo no corra ningún riesgo, indicaron especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán.

La futura madre debe tener la oportunidad de modificar y mejorar algunos hábitos de su vida, como llevar una dieta sana, equilibrada en proteínas, grasas, vitaminas, minerales y carbohidratos; además de incluir hierro y ácido fólico –una vitamina que puede prevenir defectos del cerebro, médula espinal del bebé y reducir probabilidades de que la madre desarrolle Alzheimer en el futuro- y abstenerse de fumar y beber alcohol.

Los especialistas del Seguro Social también recomendaron que deben practicarse chequeos médicos para saber si está bien su salud, como son el papanicolau, realizarse mamografías, estudios para descartar enfermedades de transmisión sexual, toxoplasmosis, rubéola o virus del herpes que podrían afectar el desarrollo del producto.

Una visita a su médico familiar servirá para hacer un cuestionario en el que se podrán descartar, junto con los exámenes realizados, enfermedades y otras complicaciones propias de la edad, peso y raza; para finalmente concentrarse en la concepción.

En el Instituto se cuenta con los especialistas capacitados para otorgar atención médica a todas las mujeres embarazadas; así como a sus hijos.

El IMSS Yucatán registra al año más de nueve mil consultas de supervisiones de embarazo en especialidades de jóvenes de 14 años de edad hasta mujeres de más de 40 años.