Mérida, Yucatán, a 08 de marzo de 2010.- La gobernadora, Ivonne Ortega Pacheco, reconoció que subsisten irregularidades en los Servicios de salud de Yucatán (SSY), sobre todo en lo referente a la categoría nominal de varios empleados, y señaló que ese problema tiene más de 20 años sin solucionarse.
REVISTA YUCATAN dio a conocer los resultados emitidos por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), con respecto a la fiscalización de la cuenta pública 2008 de Yucatán, en la que se encontraron diversas anomalías en la aplicación de los recursos federales.
Al respecto, la mandataria puntualizó que algunas de las observaciones “llevan mucho tiempo atrás, más allá de la administración pasada, hace más de 22 años se da que cuando, cualquier personal que trabaje en le Secretaría, alcanza un salario le determinan en su categoría nominal como médico aunque no sean médicos sino administrativos, y que está mal, hay que corregirlo y reconocerlo”.
“Por eso una de las observaciones es sobre personal que cobra como médicos, pero no lo son.
Están todas las observaciones, y lo que hacía falta era terminar de bajar la página para que vean que la auditoría está subsanada. Todo está completamente subsanado”, aseveró.
Sin embargo, en el documento emitido por la ASF, se observa que en la página 127 que “la entidad fiscalizada mediante oficio número SPF-1208/DPF-1168/2009 del 31 de diciembre de 2009, presentó justificaciones y aclaraciones en relación con los resultados y las observaciones que se muestran en este Informe de Auditoría, las cuales una vez analizadas por esta entidad de fiscalización superior de la Federación, se consideró que existen casos donde no aportaron los elementos suficientes para su atención”.
Por ello, la ASF especifica que de los recursos fiscalizados como parte del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), “se promovieron 26 observación que generaron 26 acciones; las cuales corresponden: 20 a Recomendaciones y seis a promociones de Responsabilidad Administrativa Sancionatoria”.
Asimismo, indica que “se determinó fiscalizar un monto de 979 millones 818 mil 600 pesos, que representa el 93.7 por ciento de los mil 45 millones 237 mil 900 pesos reportados en la Cuenta Publica 2008”.
En cuanto al desempeño del sector salud estatal, la ASF indicó que “las unidades médicas de los SSY presentaron capacidad instalada ociosa con un porcentaje menor del 85.0%, con promedio estatal del 81.4% lo que origina una subutilizanción los recursos con que cuentan en perjuicio de los pacientes de población abierta”.
“Asimismo, el promedio diario de consultas fue del 9.2, lo que significa que está por debajo del estándar de 12 a 24 consultas diarias por médico, lo que conlleva a una insuficiencia de atención de consultas a los usuarios en perjuicio de población abierta”, añade el documento.
Y advierte que “el incumplimiento de los programas y de los índices de calidad, así como del déficit en la cobertura de los servicios, impacta en las condiciones de bienestar y salud de la población objetivo del FASSA”.
Por otra parte, la revisión realizada por la ASF, también otorga elementos sobre otros fondos federales, y señala que en materia de infraestructura y obras públicas, se detectó un presunto peculado por cerca de 25 millones de pesos.
