Puebla, Puebla, 05 de mayo de 2011.- El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, rechazó que este cuerpo legislativo haya “congelado” la reforma política, ya que la minuta del Senado llegó a las 11 de la mañana del 28 de abril y el Congreso terminó sus trabajos al día siguiente y subrayó que esa ley implica 17 cambios constitucionales.
“Yo me pregunto si realmente los mexicanos quisieran que los diputados le hubiéramos dado, de un plumazo, palomita a cada una de las reformas constitucionales y ahí se hubieran quedado”, dijo el diputado yucateco.
Ramírez Marín aseguró que quienes representan a la sociedad en la Cámara Baja “no pueden ser simplemente avestruces que esconden la cabeza y dejar de escuchar las opiniones de los demás en los temas de interés nacional”.
El legislador federal, quien acompañó al presidente Felipe Calderón en la ceremonia conmemorativa del CXLIX Aniversario de la Batalla del 5 de mayo de 1862 y la Toma de Protesta de Bandera a los soldados del Servicio Militar Nacional, consideró que “existe un aprovechamiento perverso, hasta cierto punto hipócrita, de este desgarramiento de vestiduras de un partido contra otro, con fines electorales”.
Señaló que el tema electoral ha hecho una tragedia del país en los últimos años. “Desde hace por lo menos cuatro años parece que lo único que importa es el tema electoral. Es una u otra elección hasta llegar finalmente a la presidencial. Entonces lo que estamos apostando es que el país reinicie, empiece su historia después de una elección presidencial”.
Asimismo, recordó que la Cámara de Diputados dictaminó 94 modificaciones de leyes o decretos en estos tres meses, la Cámara tuvo más de 32 sesiones.
“Estoy de acuerdo en que es imprescindible hacer cambios en la legislación laboral, pero me pregunto si no alargábamos nosotros este plazo para recibir la opinión de todas estas organizaciones, dónde tendríamos a los obreros hoy, en las fabricas o en las calles manifestándose por una ley que en su opinión afecta sus derechos y favorece solamente a los empresarios”, indicó.
“O si hubiéramos sacado una Ley de Seguridad Nacional que efectivamente no cumpliera con las condiciones, no solamente de darle certeza a nuestras fuerzas armadas y definiera las facultades del Presidente de la República, pero que un enorme sector de la población la llamó ley del Estado de Sitio, ley de supresión de garantías”, añadió.
Ramírez Marín afirmó que el Congreso tiene que rediseñarse. “No tengo duda de eso. Tiene que haber –posiblemente- un menor número de diputados y cambiar muchos de los aspectos bajo los que hoy funciona”, concluyó.
