Mérida, Yucatán, a 03 de octubre de 2013.- El dictamen aprobado por la mayoría priista, el PRD y PVEM,  es contradictorio y deja amplios márgenes para que se dé un manejo discrecional a una parte del crédito que le aprobaron al gobernador, ya que, además de la cantidad solicitada se le aprobó otra adicional no especificada, afirmó la coordinadora de la bancada panista, Sofía Castro Romero.

Precisó que los diputados del PAN “no nos oponemos a mejorar las condiciones de la deuda, pero en este caso sí nos oponemos a la aprobación porque implica un daño o un riesgo para el patrimonio de Yucatán y de su gente”.

La diputada precisó que el gobernador solicitó que se le autorice contratar un crédito de mil 591 millones 380 mil 112 pesos y una cantidad no especificada, que según nuestros cálculos serían unos 400 millones, lo que al final dará como resultado que el préstamo sea de unos dos mil millones.

Para pagar la deuda, si fuera de los mil 500 millones, sólo se afectaría el 7.5por ciento de las participaciones federales, pero al incluir la otra deuda  el porcentaje se eleva a nueve por ciento, afirmó.

“Esta es una jugarreta del PRI, debido a que el gobernador y la mayoría priista realizaron esta maniobra con rapidez debido a que pronto entrará en vigor una modificación constitucional, por medio de la cual los municipios y los gobiernos estatales sólo podrán contratar créditos con mayoría calificada, condición que no tienen en el congreso local”, indicó.

Además, el pago de la deuda, que es a 20 años,  será creciente, de modo que se afectará las finanzas de varias administraciones estatales, lo que afectará el desarrollo de Yucatán.