Contra lo que algunos opinaban, Pablo Gamboa Miner, ex director de la COMEY y actualmente candidato a diputado federal por el tercer distrito, está despertando simpatías.
Su presencia en las calles genera un efecto positivo para su equipo, quienes lo ven como un auténtico líder y como una persona que está disfrutando la campaña. Las fotografías que se han tomado de él en sus recorridos, dan cuenta de un joven político con carisma. Eso sin duda se reflejará en las urnas.
Es así, que la campaña de Pablo despierta fuerte interés en los electores. La gentes misma, sin conocerlo, sale a saludarlo y se toma el tiempo de caminar con él, platicar y acompañarlo en sus recorridos, a veces largas extensiones como sucedió el primer día de campaña en que la gente caminó con él 3.9 kilómetros, allá por Francisco de Montejo.
El hijo del Senador Emilio Gamboa va haciendo la diferencia en este proceso electoral, está demostrando que trae propuestas y que tiene un proyecto de grandes obras y dimensiones para Mérida, como el Parque Lineal, y Yucatán. Sin duda, Pablo dará votos para el partido y para quienes lo acompañan en la demarcación local de su distrito federal.
Un dato: hasta el 2010, Mérida era considerada exclusiva del PAN, pero las cosas han cambiado. El PRI está ante la posibilidad cierta de gobernar nuevamente Mérida, de recuperar distritos que están en manos de la oposición y de aventajar en las federales. Y Pablo, por supuesto, será un elemento que brilla por sí solo.