Decenas de personas marcharon por las calles Montejo y centro histórico de Mérida en rechazo a las políticas migratorias del presidente de los Estados Unidos y exigiendo respeto al país, las consignas de México Unido jamás será vencido y Vibra México, fueron las organizaciones que convocaron a estas marchas, «No al muro».

Con la consigna “México unido, jamás será vencido”, un nutrido grupo de ciudadanos tomó ayer las calles de la ciudad para manifestarse por la unidad nacional, a fin de enfrentar los problemas del país, entre los que se encuentra Donald Trump, presidente de Estados Unidos, y sus políticas migratorias.

La Marcha ciudadana por el respeto para México se llevó a cabo a nivel nacional en varios estados del país. En el caso de Mérida la caminata salió del remate de Paseo Montejo a la Plaza Grande. Puntual, al mediodía empezó la manifestación a la que se fueron sumando más personas hasta llegar a la Plaza Grande.

El de ayer fue un domingo soleado y al mediodía el astro rey se hacía sentir con fuerza sobre la gente y sobre el asfalto, lo cual poco importó para los que salieron a la calle con la intención de gritar a favor de su país y contra las políticas racistas y el muro de Donald Trump.

Al frente de la manifestación se colocó una manta que decía “México unido, jamás será vencido” y a lado de ésta una bandera con el escudo de la Universidad Autónoma de México que cargaban egresados de esa institución. Al frente de la marcha se podía observar al magistrado del Poder Judicial, Pablo Monroy, que llevaba una camisa azul de la UNAM.
Se veían también diversas pancartas en las que se leían los motivos de la marcha: “Soy mexicano y amo a mi país”.

En otra manta se observaba la figura del presidente de Estados Unidos, con mirada mefistofélica, y un par de cuernos rojos que adornaban sus sienes y debajo de él a un Enrique Peña Nieto, agobiado. Se leía también: “Unidos por México. No al muro”. No faltaron los símbolos del racismo y la xenofobia asociados a Trump, como el símbolo nazi y la bandera confederada de Estados Unidos.

Los ciudadanos, bajo el sol, empezaron su caminata, animados, aplaudiendo y motivando a otros a gritar. No fue como en otras marchas, donde acude gente curtida en las lides de la protesta, porque en ésta se improvisaba, se gritaba con cierto trabajo, falta de coordinación y con consignas que a veces se descuadraban, pero el entusiasmo era evidente.

Del remate de Paseo Montejo se caminó hasta la calle 49 de ahí hasta la 62, para enfilarse a la Plaza Grande, a la que se le dio una vuelta para llegar al asta bandera, donde se entonó el Himno Nacional.

– “México, México, México”, “No al muro, no al muro, no al muro”, “México unido, jamás será vencido, México unido, jamás será vencido”, eran las consignas que se escuchaban a lo largo de la caminata.

Llamó la atención que varios extranjeros, estadounidense, también participaron en la manifestación; muchos turistas de Estados Unidos y de otras nacionalidades daban su apoyo a la marcha en las calles, mientras pasaba cerca. Aplaudían, tomaban fotos e incluso gritaban y coreaban cuando se entonaban frases a favor de México. En el camino se fueron sumando más simpatizantes de la causa, algunos extranjeros.

El contingente de “orejas” de diferentes corporaciones policiacas y de “inteligencia” que acompañó la caminata también fue nutrido, quienes tomaron fotos y video todo el camino, además de no pasar desapercibidos para nadie.
La gente alrededor y en la Plaza Grande también dio su apoyo a la marcha. Los manifestantes caminaron hacia el centro y ahí, debajo de la bandera, entonaron el himno nacional de México, luego de lo cual vinieron aplausos y el grito seguido de “México, México, México, México”.

Humberto Reyes Montiel, identificado como un ciudadano y egresado de la UNAM, dijo que la marcha no fue de protesta sino una manifestación para generar conciencia nacional a fin de enfrentar los problemas en el plano nacional y los que ha generado el presidente de Estados Unidos.

—Debemos estar únicos y crear conciencia entre la sociedad civil, por eso la convocatoria a la unidad nacional y enfrentar así los problemas políticos, económicos e internacionales, expuso.

—Tenemos un problema internacional conocido y necesitamos unirnos. Es el momento indicado para tomar fuerza y poder cambiar muchas cosas, señaló.

Por su parte, Héctor Hernández Sáenz, jubilado y también egresado de la UNAM, dijo que México debe estar unido porque cuando no lo ha hecho ha enfrentado problemas graves, como cuando el mismo Estados Unidos le despojó de la mitad de su territorio en 1847.

—Por eso estamos convocando a la unidad, como primer paso para enfrentar un problema común. Queremos hablar de unidad y no de política, expresó.

Señalaron que la de ayer fue la primera de más manifestaciones en las que participa la sociedad civil.