Mérida, Yucatán, a 15 de marzo de 2010.- Agentes de la Policía Judicial (PJE) y de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), lograron detener a Pablo Inés Duarte Euan, (a) “Pablito”, de 20 años de edad y vecino de la colonia Emiliano Zapata Sur, involucrado en la muerte de José Francisco Canché Can, cuyo cadáver fue localizado el 12 de octubre de 2008.
En la causa penal se asienta que el ahora detenido junto a otros cómplices, planearon dar muerte Canché Can, cuyo cadáver fue encontrado en una casona abandonada de la carretera Cholul-Stpatc por unas vecinas de la localidad, dictaminándose como causa de la muerte un balazo.
Conforme a las indagatorias, el ahora occiso había robado un estéreo a Duarte Euan, y durante una parranda que tuvo lugar en el domicilio de éste último en la calle 9-A número 609-A por 32-B de la colonia Maya, estos se liaron a golpes después de discutir, llegando incluso Canché Can, a lapidar los cristales del predio en represalia a la paliza recibida.
Al armarse un pleito mayor en el que intervinieron otros sujetos que acostumbraban reunirse ahí para tomar y drogarse, ocasionaron que los vecinos llamaran a la policía y fueran detenidos, por lo que al obtener su libertad, Duarte Euán, su padre Pablo Duarte Talavera, Francisco Javier Montero Pacheco (a) “El Gordo” y Víctor Modesto Pech Cohuó (a) “Modesto”, se pudieron de acuerdo para vengarse del citado Canché Can.
Llegado el 10 de octubre, armados con una pistola calibre .38 y usando una camioneta Explorer de color verde, se dirigieron a buscar a Canché Can con intenciones de ultimarlo, mismo al que hallaron en un crucero de la carretera Cholul-Sitpach cuando éste se dirigía a comprar mariguana para su consum.
Fue así que se ofrecieron a llevarlo, pero en el trayecto, el guiador se desvió hacia el lugar conocido por los lugareños como “la casa embrujada”, en donde bajaron a la víctima y le propinaron dos balazos, además de que uno de ellos lo remató con una piedra en la cabeza.
Los tres primeros fueron detenidos al poco tiempo cuando pretendían salir de la ciudad para evitar la acción de la justicia, por lo que incluso fue necesario arraigarlos, no ocurriendo los mismo con Duarte Euan, quien logró evadirse hasta que fue localizado gracias a la acción conjunta de las fuerzas especiales de investigación del Estado.
El detenido fue remitido al Centro de Readaptación Social del Estado, en donde quedó por la orden 1317/08 emitida por el Juez Octavo Penal, ante quien enfrentará el proceso penal correspondiente.
