El director general de Cultur, Dafne López Martínez, confirmó que el gobierno del Estado trabaja en un plan integral para ChichénItzá y en él está la solución de raíz del antiguo problema de los vendedores de artesanías.

“El tema de los artesanos no es nuevo. No se puede solucionar en uno o dos meses y tampoco podemos recurrir a las medidas arbitrarias”, señaló. “Estamos trabajando con el INAH, Sefotur y Sectur para mejorar los servicios de internet, las instalaciones del parador; no sólo resolver el problema del ambulantaje”.

Lamentó que comentarios sin fundamentos se vuelvan verdades y causen daño a la imagen de un sector muy valioso porque Chichén recibió este año más de dos millones de visitantes por su fama mundial.

“No existe ningún riesgo de que retiren el nombramiento. Chichén ya tenía vendedores cuando le dieron el título de maravilla del mundo”, subrayó. “No ha aumentado el número de ambulantes. Son 660 artesanos censados y a veces aumenta porque tienen ayudantes en temporadas altas de turismo. Antes estaban dispersos, ahora están ordenados”.

López Martínez dijo que dialogan con los ambulantes y ellos tienen la intención de escuchar las propuestas; también se quejan de que tienen que armar y desmontar sus puestos. Precisamente es una solución a ese problema el que negocian.

“Juntos, artesanos, empresarios turísticos y el gobierno buscaremos una solución a corto plazo”, informó