Por Isabel Juárez / Fotos: Carlos del Castillo
Telchac Puerto recibió a todos con la plaza principal vestida de rosa y olor a incienso. Los porteños parecían incrédulos de ver llegar a tantos invitados a la inauguración del festival y conforme avanzaba la noche se fueron sumando autoridades, visitantes, lugareños, artistas, vendedores y medios. Una vez que se había cortado el tradicional listón en el gran salón que expone el talento visual y plástico, se hizo un recorrido hasta llegar al Museo del Mar por la avenida principal custodiada por grandes esculturas del Mayab, donde varios aprovecharon para tomarse una selfie. La noche se respiró distinta, los pequeños sitios de antojitos despachaban gustosos a paso doble por tanto movimiento, las mujeres se apuraron a realizar artesanía, postres y dulces típicos de coco y merengue y aguas, todo estaba listo en la plaza principal para exhibir artesanías y gastronomía regional y Cubana con sus famosos mojitos. Con ese mismo gusto se iluminó el cielo e hizo correr asustado a más de un niño por la sorpresa de la pirotecnia. Una potente y afinada voz estalló en el escenario, enchinó la piel y fue seguida por las danzas cubanas e irlandesas que al ritmo de una dulce voz y el acordeón dejaron un buen sabor de boca y un deleite a la vista. Ante la presencia del alcalde de Telchac, Humberto Marrufo Ramírez, el titular de la Sedeculta, Roger Metri aseguró que el festival “será el primero de muchos.” Se develó la escultura rosada, ícono del festival, misma que permanecerá en la plaza como muestra de este primer encuentro. 10 países son los invitados con más de mil artistas para cubrir una semana de actividades del 30 de abril al 5 de mayo en Telchac Puerto, Yucatán, hoy, símbolo de la unión de un pueblo pesquero para recibir a distintas culturas.