Fiesta, devoción y patrimonio

Por Jorge Díaz Loeza

El 6 de enero es una fecha que significa mucho para las familias tizimileñas ya que la fiesta de los Santos Reyes representa no solamente una tradición, sino que es un verdadero pilar que une a nuestra comunidad y que celebramos con enorme fervor.

Esa fecha, además, es esperada principalmente por las niñas y niños, quienes aguardan la llegada de los Tres Reyes Magos para recibir sus regalos, evocando la narración bíblica que cuenta cómo se encaminaron en la búsqueda de Jesús y que, al encontrarlo, le ofrecieron regalos como oro, incienso y mirra. Con esta creencia inculcada por nuestros padres, tradicionalmente cortamos la rosca de Reyes, siendo una gran oportunidad de convivir con nuestros seres queridos.

Estoy muy orgulloso que ser tizimileño ya que contamos con uno de los templos más bonitos y grandes: la Parroquia de los Santos Reyes, la cual es reconocida no sólo en el plano estatal, sino también nacional e internacional, como el segundo templo de adoración dedicado a los patronos de oriente más importante del mundo (tan sólo después del que se encuentra en la ciudad de Colonia, Alemania).

Esta iglesia es visitada por miles de personas que vienen a pedir algún milagro. Otras familias más, regresan para cumplir la promesa concedida, ya que se tiene la creencia que una vez que los visitas, lo tendrás que hacer dos veces continuas más, es decir, durante tres años en total.

Son muchas las historias que he escuchado de las familias que han llegado a la ciudad, pues mi propia familia y amigos me describen la fe y devoción que le tienen a Melchor, Gaspar y Baltazar, cuyas imágenes son bajadas anualmente de sus nichos a partir del 28 de diciembre y permanecen al frente del retablo, para que miles de personas puedan verlas de cerca y pedirles alguna intercesión. Posteriormente, cerca del 15 de enero regresan a sus nichos.

Así también, en los últimos días de diciembre y gran parte de enero se lleva a cabo la tradicional Feria de Reyes de Tizimín, que incluye la Magna Vaquería, corridas, conciertos, muestra ganadera, charreadas, shows cómicos y shows infantiles, juegos mecánicos y decenas de actividades más.

Es increíble, la cantidad de visitantes que arriban a la ciudad durante estas fechas, pues la ciudad se viste de fiesta y se beneficia económicamente al ocuparse en su totalidad los hoteles, casas o cuartos que ponen a disposición las familias, así como la derrama en restaurantes, cocinas económicas, fondas, etcétera.

De esta forma, la festividad de los Santos Reyes representa el latido del corazón tizimileño y el alma de nuestra comunidad, uniendo familias y amigos en una vibrante celebración llena de colores, risas y devoción, dejando una huella imborrable en todas y todos los que participan en esta festividad única.

¡Vivan nuestras tradiciones!