Por Martha Esther López Huan
Mérida, Yucatán, a 21 de octubre de 2010.- A unas horas de que el Teatro Mérida cambie su nombre al de Teatro Armando Manzanero, el compositor agradece con infinito cariño, y deja entrever su profundo orgullo por tan noble tributo del gobierno, poetas, literatos, pueblo yucateco “y todas las personas que tienen que ver con la cultura”.
-No sabe usted el profundo orgullo que siento, pocas veces un personaje vivo puede tener un honor como ese y me siento infinitamente agradecido –aseveró el compositor horas antes de presentar un espectáculo en el Teatro que llevará su nombre y en el cual se inaugurará el Festival de las Artes Otoño Cultural 2010.
Adentro del recinto, un busto adornará el vestíbulo, así como dos pinturas del artista yucateco Mario Guido. La marquesina con el nombre Teatro Armando Manzanero se iluminará en un evento especial, que encabezará la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco y el titular del ICY, Renán Guillermo González, acompañados de artistas, tríos y trovadores, así como los hijos y nietos del yucateco más universal: Armando Manzanero Canché.
-Maestro, ¿qué siente cuando le dicen que todo el Otoño Cultural será dedicado a su arte, a sus 65 años de trayectoria?
-Es una delicia y me siento muy halagado. Me siento muy halagado porque no soy una persona fácil de emocionar. Todo eso me lleva a pensar que ahora sí, lo hice todo –manifestó el autor de “Somos novios”, “Esta tarde ví llover”, “No”, “Voy a apagar la luz” y otros temas que en Festival de las Artes, que comenzará este viernes 22 y concluirá el próximo 12 de diciembre, se interpretarán en diversos géneros y en distintos foros de Yucatán.
Como una forma de agradecimiento, Manzanero cantará con la Orquesta Típica Yucalpetén, el tenor Marín y Juan Pablo Manzanero.
-Es que no necesito a más compañía que mis músicos, la Típica y Juan Pablo –indicó.
-Dicen que Manzanero es el yucateco más universal, entonces le pregunto: ¿qué significa Yucatán para Manzanero?
-En primer lugar, Yucatán ha sido mi eterna Bandera desde el día en que nací y mientras más lo conozco y más trato con gente que sólo me dice cosas halagadoras de Yucatán, me siento inmensamente feliz. Y por si fuera poco, la herencia cultural que traigo de los mayas es algo que llevo con mucho orgullo por el mundo –dijo y en cada palabra se siente el orgullo de saberse heredero de una cultura que sigue maravillando al mundo.
