Tras publicarse en el Diario Oficial de la Federación, el decreto por el que se crea la Secretaría de Cultura, queda pendiente la designación de su titular, y en camino la creación de una Ley general de Cultura.
Como se recordará, la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados recibió en octubre la iniciativa presidencial. Luego se realizaron mesas de diálogo, discusión e intercambio de experiencias y puntos de vista entre y con los diferentes actores del quehacer cultural en México.
El día la iniciativa 11 fue aprobada por los diputados y el 15 en el Senado.
Diversos legisladores han coincidido: La Secretaría de Cultura no tendrá un incremento en el aparato burocrático, sino un ordenamiento. Lo que se busca es que con mucho más orden en el sector y con una coordinación más adecuada, lleguen más recursos, no para la burocracia sino para que al cultura empiece a ser vista de modo distinto en el país, dicen.
Porque, la cultura no sólo atrae turismo e inversión, sino que es uno de los elementos de los países que influyen en el rumbo que se le da al mundo. Así, la propuesta enviada por el presidente de la República el 8 de septiembre pide la transformación del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) en esa dependencia de tipo federal.
También, patrocinar la realización de congresos, asambleas y concursos de tipo científico, técnico, cultural y artístico, y guiar actividades artísticas, culturales, recreativas y deportivas que realice el sector público federal, así como establecer criterios educativos y culturales en la producción cinematográfica, de radio y televisión y en la industria editorial.
Igualmente, dirigir y coordinar la administración de las estaciones radiodifusoras y televisoras pertenecientes al Ejecutivo Federal, con exclusión de las que dependan de otras Secretarías de Estado, y conservar, proteger y mantener monumentos arqueológicos, históricos y artísticos del patrimonio, según las disposiciones legales en la materia.
Otras obligaciones y atribuciones son organizar, administrar y enriquecer las bibliotecas generales y especializadas que sostenga la propia Secretaría o que formen parte de sus dependencias, y fomentar las relaciones de orden cultural con los países extranjeros, con la colaboración de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Todo ello, sistemáticamente.
También deberá promover la producción cinematográfica, de radio y televisión y de la industria editorial, con apego a lo dispuesto por el artículo tercero constitucional cuando se trate de cuestiones educativas, estimular el desarrollo del teatro en el país, y organizar concursos para autores, actores y escenógrafos y en general promover su mejoramiento.
Otorgar becas para que los estudiantes de nacionalidad mexicana puedan completar ciclos de estudios en el extranjero y realizar investigaciones, son responsabilidad de la nueva Secretaría de Cultura, quien será la encargada de organizar misiones culturales y también controlar y mantener al corriente el registro de la propiedad literaria y artística del país.