El vigilante de una empresa, ubicada a la altura del kilómetro 16 de la carretera Mérida-Umán, reportó a este medio de comunicación el hallazgo de una cantidad indeterminada, de lo que parece ser, piel de varios perros.

Según se averiguó en el lugar, la noche del pasado sábado un ciclista circulaba sobre la ciclovía paralela a la carretera Mérida-Umán, cuando a la altura del kilómetro 16 su bicicleta se atoró con un bulto sin identificar.

Al ver el obstáculo se bajó y descubrió que se trataba de piel de perro, y al adentrarse al monte descubrió otras más.

En su desesperación por no encontrar respuesta ante su descubrimiento llamó al guardia de una empresa que se encuentra a unos metros del lugar y entre los dos reportaron el hecho a este medio de comunicación.

Ambos pidieron a las autoridades verificación de los sitios donde se vende comida regional como cochinita pibil en los alrededores de Umán y Mérida, pues sospechan que ese fue el fin de estos animales.

Uno de los hombres recogió las pieles y las guardó en una bolsa ya que comenzó a descomponers