Renovados y todo, pero volvieron a perder. Un dejavú de las temporadas pasadas, al menos en el resultado.
Los Venados FC Yucatán volvieron a sufrir en la generación del fútbol, y debutaron con una derrota de 2-1 ante los Mineros de Zacatecas, anoche en el Estadio “Carlos Iturralde Rivero”.
Al 10, Zacatecas dio una muestra de su pegada, pero el cabezazo de Luis Madrigal se fue desviado de la cabaña de Armando Navarrete.
Al minuto 14, Jhony Magallón, casi sin querer, marcó el primero de la noche, desviando un cabezazo en un tiro de esquina, aunque Navarrete pudo hacer más, pues se le terminó colando por debajo de su humanidad.
Lo más peligroso de los ciervos llegó por la banda izquierda que, dicho sea de paso, fue lo mejorcito de la noche, con Alejandro Vela y Gabriel Báez, argentino que llegó a reforzar al equipo.
Los astados estaban obligados a darle más a su afición y, para el segundo tiempo, comenzaron a apretar más en la salida, obligando a los centrales rivales a reventar la pelota.
Esa presión rindió frutos, pues una jugada entre Luis Sánchez y Omar Islas —quien cayó en el área— derivó en el pénalti que cambió por gol el argentino Luciano Nequecaur.
Los Venados mejoraron aún más con la entrada de los argentinos Franco Faría y Lucas Ontivero, pues este último se quedó a nada de cerrar la pinza y marcar el de la diferencia.
Cuando mejor jugaban los yucatecos, llegó el baldazo de agua helada, pues, luego de un trazo que no llevaba nada, Christian López, se acomodó y, con un sencillo movimiento del cuerpo, se quitó a Manuel López Mondragón para definir ante Navarrete y ponerse 2-1 al minuto 84.
El tiempo terminó por escurrirse, y los Venados sufrieron su primera derrota de la campaña, una muy dolorosa por las formas. No jugaron mal, pero volvieron los fantasmas de las temporadas pasadas.
Antes de comenzar el duelo se realizó un minuto de silencio, en memoria de la madre del preparador físico Luis Bongiovanni, quien falleció hace unos días.
En un dato curioso, las tarjetas amarillas (al menos en presencia) brillaron por su ausencia en la segunda mitad, pues el árbitro Arturo Cruz Hurtado las olvidó en su vestidor. Después regresaron y todo volvió a la normalidad.
Ahora, los Venados visitarán el próximo viernes a los Murciélagos de Los Mochis
