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Recorre la caverna del Cenote Xcabachen

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Recorre la caverna del Cenote Xcabachen

Ven a conocer la leyenda del Cenote de Maní, narrado por alguno de sus habitantes; refresca tu cuerpo al tiempo en que revitalizas tu alma.

Maní es una tierra mágica que remonta los inicios de su nombre a la lengua maya “Lugar donde todo pasó” o “Manik” día del calendario maya relacionado con el venado. Aunque no hay datos históricos exactos del inicio de la ocupación de dicha región por los mayas, gracias a la evidencia arqueológica en el cenote Xcabachen y los conjuntos arquitectónicos explorados en Tipikal, localidad ubicada en el municipio, se estima que grupos humanos se establecieron en este lugar hacía el período preclásico medio, aproximadamente entre los años 1000 y 400 A.C.

Cuando los españoles llegaron a Yucatán, encontraron que en las tierras bajas del norte de la península existían al menos 18 “cuchcabal” o centros políticos, siendo en ese momento Campeche, Maní y Sací las grandes capitales prehispánicas. Los Xiues y su líder el “halach uinic” Tutul-Xiu se aliaron desde el principio con los conquistadores, ganando ciertos privilegios, mientras que los cocomes continuaron ofreciendo resistencia hasta 1547. En ese mismo año, siete frailes franciscanos, entre ellos Luís de Villalpando y Melchor de Benavente, se dirigieron al sureste de Mérida para evangelizar Maní, en donde fundaron su tercera sede. Con ayuda de los indígenas comenzaron la construcción de un convento, con una capilla abierta y una escuela de indios, lo que se convirtió en uno de los conjuntos conventuales más importantes de la península.

Características:

El municipio alberga un abundante patrimonio edificado de la época colonial. En primer lugar, se encuentra el convento de San Miguel Arcángel, fundado en 1549, fue construido principalmente entre el siglo XVI y XVII utilizando como materia prima las piedras de las construcciones mayas prehispánicas. Las obras iniciales estuvieron a cargo de Fray Juan de Mérida, constituyendo el tercer conjunto conventual en ser fundado en la provincia, después de Campeche y Mérida. Se compone de un gran atrio rectangular, una capilla posa, una capilla abierta, la iglesia principal con cuatro capillas, un claustro, el recinto conventual, un huerto, una noria y los vestigios de la antigua escuela de indios. En el interior de la iglesia y el convento se encuentran pinturas murales del siglo XVI y siete altares con cinco retablos polícromos del siglo XVII, que son ejemplares excepcionales del arte colonial mexicano.

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Atractivos:

  • El cenote Xcabachen
  • Poc Chuc
  • Arte textil, X’manikté que significa “siempreviva” y hace referencia a lo eterno. Es una de las técnicas de bordado más antiguas en Yucatán
  • Más de 30 meliponarios en el municipio, una actividad ancestral heredada por los mayas.

Ubicación:

Región Península de Yucatán. Se encuentra aproximadamente a 90 kms de la Ciudad de Mérida, colinda al norte con el municipio de Mama al sur con Akil, al este con Teabo y al oeste con Dzán. El acceso se realiza por carretera, mediante tres rutas: desde el nororiente pasando por Mama, Chumayel, Teabo y Tipikal; desde el poniente pasando por Muna, Ticul y Dzán; o desde el sur pasando por Tekax, Akil y Oxkutzcab.

Da click en el mapa para ubicarlo:

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Más información visita:

visitmexico.com/tipos-de-turismo/pueblos-magicos

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