En noches sin Luna las sombras
comulgan con nuestra propia sombra
Las sombras
En noches sin Luna las sombras
comulgan con nuestra propia sombra
Las sombras
Yacen por doquier
En espejo anfibio
palpitan al vaivén
de la levedad del viento
crispando la cresta
de aguas en reposo.
Habitan bajo la fronda
de árboles o matorrales
trenzados en coronas reales
Aún en noches sin Luna
las sombras no duermen
En quiebres y danzas
agitan su cuerpo etéreo
Ánimas errantes pasman
ante ellas
En la penumbra densa
liberan los misterios
amorfos de la oscuridad.
Las sombras
Colman el silencio
nocturnal de espectros
seductores insinuantes
Sublimando los sentidos
al ritual ancestral
de cortejos delirantes
Anhelos de intimidad
perenes
Ellas amparan
ocultan el brillo
torrencial de lava púrpura
que de Norte a Sur
funden en instantes
las furtivas pasiones.
Al amparo
de las sombras
El amor anida
son el aura de los amantes
son cómplices de susurros
Les cubren
Les abrazan
Les vigilan
Hasta la llegada
del Alba
Quien dulcemente
las evanece
como la bruma
entre roca y floresta
en sutil encanto
los silencia extenuados.
Ellas
eclipsan la Luz atrapada
en la frente de los espejos
replicando abismos
y emparedando vértigos
de entes taciturnos
que solo aguardan
a que la noche se disipe
para precipitar su fuga.
En los espejos se crean
ecos de sombras
Que traspasan
Puertas, techos
y alcobas
eludiendo su calvario
hacia la evanescencia
de un cuerpo creado
con despojos de sueños.
Las sombras
En la profunda oscuridad
de la noche
Todas cosas tangibles
o las ilusiones efímeras
Mutan inexorablemente
en sombras polimorfas.
Su ausencia
Solo es imaginaria
Los sueños emanan sombras
La vida diáfana rezuma
un mundo de sombras
pendular
De la refulgencia
segadora a la tibieza
de los claroscuros
místicos apacibles.
Las sombras
Como fieles canes
acompañan nuestros pasos
Nos siguen hasta el confín
del camino crepuscular
pletórico de hojarascas otoñales
Y en un día cualquiera
Nos abandonan
a nuestra suerte
Nuestra sombra
sabrá andar sola
a pesar de nuestra
persistencia.
Rafael Aguiar
6 de junio 2020