Texto y fotografías: José Luis Gómez Peniche

En la parte norte de la bella costa del Estado de Yucatán se encuentran varios puertos que en los últimos años están tratando de incrementar su actividad turística y de alzar la mano cuando se habla de razones para visitar la península. Uno de ellos es el pintoresco puerto de San Felipe.

Sin duda alguna este puerto, como la mayoría de ellos, se distingue por su actividad pesquera, siendo el oficio más común entre sus habitantes. Sin embargo, de un tiempo para acá, San Felipe busca aprovechar sus atributos naturales para atraer más turismo. Desde un simple paseo en lancha, hasta un tour por todas las playas y lugares cercanos, este lugar definitivamente tiene mucho que ofrecer al visitante local y foráneo.

Déjate sorprender por sus casas de colores que acapararán tu atención, la tranquilidad del mar, la diversidad y gran cantidad de restaurantes y negocios locales que te ofrecen mariscos frescos y deliciosos.

Una de las ventajas más importantes que tiene San Felipe, es que puede ser un punto de partida para conocer los lugares de la zona, ya que es prácticamente la puerta de acceso a la reserva de la Biósfera de Río Lagartos, así como Las Coloradas e incluso disfrutar el avistamiento de aves, una experiencia redonda y completa que te ayudará a despejar la mente, apreciar la naturaleza y vivir de cerca lo que Yucatán tiene para ofrecer.

San Felipe se encuentra aproximadamente a 150 kilómetros de la ciudad de Mérida, tomando la carretera Mérida – Tizimín / Tizimín – Río Lagartos y saliendo en el entronque con San Felipe. Podrás encontrar tours desde los $600 aproximadamente y dependiendo de que tanto quieras conocer y recorrer. Es un viaje que valdrá totalmente la pena y con el que reafirmaremos el gran potencial que Yucatán tiene en cuanto a turismo.

No lo pienses mucho, y atrévete a vivir esta experiencia. #AsómateALaPenínsula y conoce hasta el último rincón de tu Estado.