El gobierno del Estado ya está cobrando uno de los impuestos llamados cedulares que se aprobaron este año para Yucatán: el 5% sobre las utilidades que las empresas entregan a sus empleados.

El titular de la Agencia de Administración y Fiscalización del Estado, Carlos Pasos Novelo, recuerda que ese gravamen es a una tasa de 5% y que el Ejecutivo estatal espera una captación de 53.5 millones de pesos este año por ese concepto.

El funcionario explica que el gobierno del Estado promovió ese impuesto, que ya se aplica en otros estados de la República, para compensar una posible baja en los ingresos que llegan vía los pequeños contribuyentes.