¿Quién diseño el calendario que colocó el arranque de las campañas electorales en viernes santo?

Sea como fuere en estos días de guardar, los políticos se verán las caras en las misas o en las playas, pero no van a ir a buscar el voto o arderán para siempre en los fuegos eternos de la condena pública, ello a pesar de que este país supone un gobierno laico, sin embargo hay una suerte de respeto por esa enorme masa católica que suele perdonar la corrupción, pero nunca la mala idea de ver a los políticos pedir los votos envueltos en ropajes cristianos, así que las campañas propiamente inician el lunes próximo.

Todas las encuestas resultan estériles ante lo que apenas empieza, el periodo de intercampañas sólo sirvió para raunds de sombra, medir fuerzas, reforzar al equipo, pulir la máquina y preparar la batalla. Los recientes enroques en los comités municipales dan lecturas extrañas; Mauricio Díaz Montalvo llega al comité municipal del PAN para apoyar a Renán Barrera que no sería favorecido con el equipo de Mauricio Vila, quien sólo hará campaña para su propia causa, aunque Vila deberá saber que no se gana la gubernatura perdiendo la alcaldía, mientras que el PRI manda a Francisco Torres Rivas al comité municipal para reforzar la campaña de Mauricio Sahuí en Mérida, donde se sabe que Víctor Caballero viaja con una mejor estructura, misma que no estará tan dispuesta con Sahuí.  Cosas raras se verán en esta campaña donde los amigos no los son tantos y donde la unidad es de dientes para afuera y si no pregúntenle a Celia Rivas que aún no termina de entender que demonios le paso a sus amigos que la dejaron fuera de la boleta electores y en su lugar mandaron al que sea menos a ella. En la  política no hay guerra sucia, ni limpia es simplemente la guerra total.

La dicha de llamarse Joaquín

Ya Morena se logró colar a los tres grandes de Yucatán (PRI-PAN-Morena),  por ello la votación se dividirá en tres de la mano de Andrés Manuel López Obrador y localmente de Joaquín Díaz Mena «Huacho» considerado como un gran campañero, compitiendo a tú por tú con Mauricio Sahuí y Mauricio Vila, ahora dependen de las estrategias y el alcance, así como la posterior defensa del voto. Serán noventa días para que logren colar sus ideas y mejorar la asistencia a las urnas. Creo que esta es la lección más competirá y cada partido mandó a lo mejor de su camada.

Por lo visto México no pondrá sus barbas a remojar

No cabe duda somos un país algo raro y abrasivo, con un umbral del dolor demasiado elevado para sentirnos afectados por tanta corrupción e impunidad; dos de los mayores males que aquejan a este país y para el que no tenemos mayores respuestas, sólo hemos sido capaces de destapar los escándalos, pero no de castigarlos como en el Perú donde el presidente se vio obligado a pedir licencia y salir destapado ante la podredumbre del escándalo de compra de votos que fuerza la dimisión de Pedro Pablo Kuczynski  y la guerra interna de los hermanos Fujimori que acabaron con el presidente, implicado el caso Odebrecht, el dirigente se rindió y evitó una vergüenza mayor a semanas de la Cumbre de las Américas en Lima al ver que iba a ser destituido por el Parlamento, Martín Vizcarra lo sustituyó para vergüenza de los peruanos que desde Alberto Fujimori no han visto una sola.