El cierre masivo de salas y el aislamiento de la población fuerzan a las productoras a revisar todo el modelo de exhibición.
El coronavirus fuerza a cambiar las reglas del cine. Universal Pictures anunció este lunes que va a ofrecer en streaming los estrenos con los que tenía previsto competir en salas en las próximas semanas, en el reñido mercado de las vacaciones de Pascua. Se trata de una ruptura insólita con el criterio de las grandes productoras de Hollywood, que llevan dos años luchando contra los intentos de Netflix de exhibir las películas a la vez en salas y bajo demanda online, en vez de reservar una ventana exclusiva para los cines. La situación de excepcionalidad que vive Estados Unidos ante la expansión sin control del coronavirus ha acabado en un fin de semana con la discusión.
Tres películas de Universal que ya estaban en salas se encuentran ya disponibles online para alquilar por 20 dólares por 48 horas. Se trata de La caza, El hombre invisible y Emma. La entrada de cine en las grandes ciudades de Estados Unidos va de los 10 a los 18 dólares según cines y sesiones. Las películas se pueden ver en servicios como iTunes y Amazon Prime Video. Trolls 2: Gira mundial, que tenía previsto su estreno el 10 de abril en plenas vacaciones, sigue adelante con la fecha en los cines que estén abiertos, pero se ofrecerá simultáneamente en streaming a 20 dólares.
“Antes que retrasar estos estrenos o sacarlos en un panorama de distribución con dificultades, queremos dar una opción a la gente de ver estos títulos en casa de forma accesible y a buen precio”, dijo el consejero delegado de Universal, Jeff Shell, en un comunicado citado por Variety. “Esperamos y creemos que la gente seguirá yendo a los cines allí donde estén disponibles, pero entendemos que los habitantes de varios lugares del mundo cada vez tienen menos esa posibilidad”.
El estreno más importante de Universal esta primavera, Fast 9, se retrasó directamente a la primavera de 2021. El estudio no ha dicho qué piensa hacer con algunas apuestas del verano imprescindibles para sus números de taquilla, como la nueva de la saga Gru, prevista para el 3 de julio. Este lunes, el presidente Donald Trump admitió por primera vez que la crisis del coronavirus se puede prolongar hasta agosto.
El lunes, ninguno de los otros grandes estudios de Hollywood había tomado una decisión sobre el estreno de sus películas, aunque la industria ve el paso dado por Universal como un experimento clave que, aunque forzado por las circunstancias, puede cambiar las reglas de exhibición si salen los números. La matriz de Universal y NBC, Comcast, acaba de lanzar su propio servicio de streaming, Peacock, con el que trata de hacerse un hueco entre gigantes como Netflix, Disney+ y Amazon Prime Video.
Las salas de cine tienen un periodo de exclusividad de 90 días antes de que una película se pueda ofrecer en video. Las grandes cadenas de exhibición en EE UU se niegan a renegociar estos términos ante el riesgo de que su negocio desaparezca. El pionero en este sentido es Netflix, que solo respeta a los cines lo justo para poder optar a premios, pero está tratando de mover a la industria hacia el streaming y afirma que los dos ámbitos de exhibición pueden convivir.
La situación para los cines es de parálisis total desde este fin de semana. Las ciudades de Nueva York y Los Ángeles ordenaron el cierre de todos los comercios no imprescindibles y la autoridad sanitaria en Washington ha recomendado prohibir las reuniones de más de 50 personas. Ante esta situación, la segunda mayor cadena de cines del país, Regal Cinemas, anunció que a partir del martes cierra todas sus salas, 7.155 pantallas en 42 estados. La cadena más grande de exhibición, AMC, anunció que va a limitar las entradas a 50 personas por sala.
Fuente: El país
