En 1958 falleció el compositor, director y músico de orquesta José Pablo Moncayo, uno de los principales representantes de la música nacional mexicana

A 62 años de su muerte, sigue vigente el legado del también pianista y percusionista, a través de diversas obras se hace presente, mismas en las que logró reflejar y describir los paisajes mexicanos. Moncayo nació el 29 de junio de 1912 en Guadalajara, Jalisco, sus padres fueron Francisco Moncayo Casillas -carpintero de profesión- y Juana García López.

José Pablo comenzó sus estudios de piano a los seis años de edad cuando se mudó a la capital del país, años más tarde se inscribió en el Conservatorio Nacional de Música, donde estudió armonía y composición bajo la tutela de los maestros Candelario Huízar y Carlos Chávez. En 1932 ingresó como percusionista y pianista a la Orquesta Sinfónica Nacional.

El Huapango fue su obra sinfónica más célebre, inspirada en sones y ritmos veracruzanos que fue estrenada el 15 de agosto de 1941 en la Orquesta Sinfónica de México, destaca el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA). La mulata de Córdoba y el poema sinfónico Tierra de temporal, Amatzinac y Trío para Flauta son algunas obras que se enmarcan dentro del movimiento nacionalista, así como su único ballet Tierra.

El 16 de junio de 1958 da su último respiro José Pablo Moncayo en su casa de la Ciudad de México, a unos días de cumplir 46 años. Sus restos se encuentran en el Panteón Español, de esa ciudad.

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.- Con información de La Voz de Durango.