El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) comenzó los preparativos para la reapertura de las zonas arqueológicas, museos y sitios de interés turístico.
Tras emitir el manual del Plan de Retorno e Incorporación a la Nueva Normalidad, la dependencia estableció que en cuando el semáforo de bioseguridad tome el color amarillo, se reabrirán estos espacios.
El INAH publicó esta semana el protocolo para las nuevas prácticas de desempeño de los espacios dependientes de esta autoridad federal, una de las condiciones que se enmarca en estas nuevas disposiciones son: reducir hasta en un 70% el flujo de personas en recintos abiertos y cerrados.
De esta manera, los responsables de cada recinto establecerán los mecanismos y aforos permitidos, dependiendo de su flujo y audiencia.
Según se ha dado a conocer, sitios arqueológicos como Chichen Itzá serán mucho más selectivos y con horarios escalonados con un aforo por día de únicamente mil personas, cuando originalmente lograba captar hasta 6 mil visitantes diarios.
“El objetivo, es garantizar las condiciones de salud y seguridad al personal del Instituto, en todas las formas de contratación, a los estudiantes de las escuelas del INAH, a los visitantes de zonas arqueológicas y museos, a los usuarios de servicios, proveedores, y a quienes acuden para atención de trámites institucionales, implementando protocolos y acciones para la prevención y mitigación de riesgos sanitarios”, marca la nueva dispocisión.
Estas disposiciones contribuirán a lograr, de manera corresponsable, un retorno seguro, saludable y solidario al trabajo, y con ello, a la normalización de la vida social y económica del país, y al disfrute y aprecio del patrimonio cultural de México.
A partir de estas disposiciones, los trabajadores, personal administrativo y operativo, proveedores y visitantes deberán cumplir de manera rigurosa con las exigencias de usar cubrebocas, cuidar la sana distancia, establecer medidas en los espacios cerrados, así como su rigurosa desinfección en horarios establecidos, de la misma forma garantizar la disponibilidad de gel, jabón y servicios en las áreas públicas y privadas de cada espacio utilizado.
En su caso, Arturo Chab Cárdenas, director jurídico del INAH-Yucatán, destacó que el personal de la dependencia se está capacitando en este momento para la reactivación de los recintos culturales y de interés turístico, con ello, la aplicación a las normas de operatividad que deberán regir a partir del inicio de actividades que podría ser en la primera semana de julio, cuando el semáforo tome el color amarillo.
Es importante que las medidas impuestas por la dependencia regirán hasta nueva orden, se busca que no se relajen estas medidas y en su caso se pueda establecer un orden más estricto y una mayor corresponsabilidad de parte de trabajadores, personal de investigadores y visitantes a estos espacios que son de interés cultural y turístico.
El protocolo de bioseguridad establecido considera que, estas disposiciones podrán restringirse si el número de contagios se mantuviera al alza y los semáforos epidemiológicos -estatal y federal- establecieran cambios o modificaciones a los procedimientos de seguridad de avance del virus.
Las nuevas disposiciones del INAH serán efectivas en 194 zonas arqueológicas, 162 museos, 98 bibliotecas y recintos de interés histórico y patrimonial, 3 escuelas y 188 oficinas públicas.
.
(ACOM).
