Por José Luis Preciado
«Minuto 85 y el PRI nos va ganando dos a cero», dijo Carlos Aldana Herrera, uno de los más férreos acusadores de panistas, junto con Patricio Patrón, Ex Gobernador de Yucatán, ambos han emprendido una cruzada moralista contra «los moches» o porcentajes que le pedían a los alcaldes por obra pública. Los panistas se están sacando los ojos, todos contra todos en esta cámara húngara de la ninguno se está salvando, incluye a Mauricio Vila, alcalde de Mérida, el mejor posicionado en la ranking general, seguido por Jorge Carlos Ramírez, Renán Barrera, Mauricio Sahuí y los demás, (encuesta de CISEN).
Es un hecho, todos los panistas aspiran a la alcaldía o gubernatura y sienten que todos pueden ganar, -ese es el problema-, la excesiva confianza en que los electores puedan dar un golpe de timón y voten todo en azul, cuando existen otras posibilidades, una de ella podría aplicarla el PRI, pedir el voto diferenciado, es decir que se vote tricolor al gobierno del estado y en azul a la alcaldía de Mérida y así, «gozar de la diferencia que implica ese cruce».
Mientras el PAN sigue envuelto en su ambición mezquina, nada podrá lograr conciliar a sus principios con sus ambiciones.