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¡Bienvenidos! Presentan guía para nuevos habitantes meridanos

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¡Bienvenidos! Presentan guía para nuevos habitantes meridanos

A través de las páginas de la primera guía para inmigrantes en la ciudad “Vivir Mérida”, la capital yucateca habla a quienes han decidido vivirla. Habla sobre su historia, tradiciones y cultura; sobre su clima y otras cuestiones de interés. Es una bienvenida para ellas y ellos ante la importante explosión demográfica que ha sido consecuencia de la tranquilidad que emana la urbe.

“Decidimos hacer una guía esencial, la cual es producto de varias reuniones con diferentes grupos de inmigrantes, algunos recién llegados; otros con más tiempo viviendo aquí, gente de diversos puntos de la república y también de otras partes del mundo” explicó Diana Canto Moreno, regidora síndico municipal del ayuntamiento.

En esas reuniones, casi la totalidad de los asistentes coincidió en que, si hubieran tenido la información contenida en la guía, las cosas se les hubieran facilitado. Es así como incluyeron, con la asesoría de Pedro Lewin Fischer y Estela Guzmán Ayala, investigadores expertos en la materia, la guía con lo que consideraron más importante.

“Con información muy práctica y consejos que les permitan adaptarse mejor a nuestras costumbres y tradiciones; también un poco de cultura e información”, añadió Canto Moreno.

En ese sentido, aseguró que la comunicación con este sector es constante y se efectúa mediante la oficina municipal de Atención a Migrantes, en la cual promueven un diálogo permanente a través de mesas redondas con 20 diferentes grupos; e incluso con gente de Mérida.

Estas redes tienen como objetivo el brindar herramientas para que las personas que llegan a vivir a la ciudad se puedan desenvolver en este nuevo entorno, pues han dejado a sus familias, en muchas ocasiones a razón de la violencia que se registra en otros puntos del país; aunque también por cuestiones económicas o de salud.

Cuestión de seguridad

La comuna no cuenta con una cifra exacta relativa a cuántos migrantes hay en Mérida. Es difícil obtener el dato, pues quienes llegan a vivir de otras partes de la república son mexicanos; pero en cuanto a la gente proveniente de otros países, señaló que se tiene registro de 92 nacionalidades en la entidad.

Acorde al Inegi, Yucatán ocupa el primer lugar en procesos migratorios causados por la violencia delictiva, con un 12.9 por ciento. Por esta causa, del 2015 al 2020, 28 mil 448 personas han venido a vivir al estado, según último censo de Población y Vivienda.

En cuanto a las zonas en donde se concentra esta población, señaló que los que vienen de otros países suelen asentarse en el centro de la ciudad; y también en fraccionamientos y comisarías caracterizadas por su tranquilidad. Quienes llegan del interior del país se concentran en los fraccionamientos nuevos, después de la periferia. 

No son pocos quienes eligen Mérida a razón de la calidad de vida, el cuidado al medioambiente y la tranquilidad que se respira en la urbe. También la eficacia de los servicios públicos es un factor que detona esta inmigración.

“Muchas veces es cuestión de seguridad, pues han pasado por algo en sus lugares de origen y vienen para estar tranquilos. Otros necesitan aire puro por cuestiones de salud y en general vienen buscando calidad de vida para criar a sus hijos”, acotó Diana Canto.

Invitan a la unidad 

El clima tropical que impera en la capital yucateca, según reza la sección “¡Habitantes inesperados!”, llama también a una gran cantidad de animales e insectos que habitan patios y jardines. No es extraño ver a los dzotz -murciélagos en lengua maya- colando sobre las casas; o los toloks, que son iguanas que pueden alcanzar más de un metro de longitud. Otro muy común es la zarigüeya, que en el estado se le conoce como ooch.

Además del particular acento que se escucha en Yucatán, hay palabras que son inconfundibles, como aporrear -azotar algo-; chopcalle -calle cerrada-; chop –cuando pican un ojo-; o el clásico mare, que expresa sorpresa o entusiasmo, dice otra parte de la guía, “Hablar en Mérida”.

Achocar; anolar; Chichí; chuchul, colís; y macachí, son también algunos de los términos que seguramente escucharán en la zona, los cuales significan “meter a la fuerza”, arrugado, pelón y cállate, respectivamente.

En los encuentros que el municipio ha sostenido con los migrantes -varios de ellos en El Olimpo- se habla de que Mérida es una ciudad pacífica; y se invita a la gente a “hacer sociedad” con sus vecinos a fin de contar con una mejor comunicación y generar sinergia.

“Por ejemplo, si vemos que algún vecino se va de viaje, ayudarnos entre todos para ser una ciudad segura, porque si bien, mucho tienen que ver las autoridades en mantener esa calidad de vida; también nosotros como sociedad tenemos que aportar a la seguridad”, advirtió.

En la cuestión de la cultura, comentó que a veces se tiene la concepción de que los meridanos son muy cerrados, lo que atribuye a que antes Mérida era una ciudad pequeña en donde todos se conocían, lo que a ellos (los inmigrantes) puede parecer algo “malo”, pero aclaró que no es así. 

La funcionaria municipal expuso que no existe una actitud generalizada de rechazo hacia los grupos de migrantes, aunque sí reconoció que “hay de todo”, por lo que no se puede decir que no exista este tipo de conductas.

Otra de las inquietudes de este sector se enfoca en las altas temperaturas, pues “todo mundo sabe que al llegar a Mérida habrá mucho calor”; y hay otros aspectos como la humedad que no son comunes en otras latitudes, lo que genera una mayor sensación térmica, se suda mucho.

De igual modo está la incidencia de las lluvias, sobre todo porque a últimas fechas las precipitaciones en la ciudad han repuntado y la gente dice “en mi vida he visto tanta lluvia” -nosotros tampoco- pero ya estamos acostumbrados a nortes; y en algunas ocasiones a huracanes.

Seguirá la explosión demográfica

Pese a la explosión demográfica, la pandemia hizo descender las cifras de inmigración en Mérida, lo que puede evidenciarse -sobre todo- en el sector inmobiliario cuyas ventas bajaron de manera considerable. No obstante, a la par de la reactivación de la economía, también ha llegado más gente.

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Esto también se hace notar, desde la comuna, en el pago del Impuesto Sobre la Adquisición de Inmuebles (ISAI), el cual se paga por la compra y venta de propiedades y también se ha visto reducido en tiempos pandémicos.

Indistintamente de lo anterior, para la regidora Canto Moreno, es un hecho que llegarán más familias a vivir a la capital yucateca, lo que calificó como “natural y normal” pues las ciudades se construyen a través de estos movimientos históricos.

“Si seguimos teniendo los mejores servicios, sigue siendo una ciudad segura y seguimos cuidando el medioambiente, seguramente más gente va a llegar buscando esas opciones para su vida y la de sus hijos”, adelantó.

Para seguir manteniendo estos estándares y garantizar un crecimiento ordenado de cara a este fenómeno, Diana Canto destacó la necesidad de que tanto el gobierno como la ciudadanía trabajen de la mano. 

“Gran parte nos corresponde como autoridades, pero también muchas de ellas como ciudadanos. Si vienen porque les gusta que la ciudad esté limpia, pues cuidemos que siga siendo así, lo mismo en el tema de la seguridad. Nos corresponde a todos”, concluyó.

Las y los interesados en consultar la guía Vivir Mérida pueden acceder a través de merida.com.mx/migrantes.

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-Con información de La Jornada Maya.

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