Los Cabos, Baja California Sur, es la ciudad más violenta del mundo en relación al tamaño de su población. De este modo, cinco de las diez ciudades con mayor tasa de homicidios a nivel global se ubican en México.
De acuerdo con el ranking 2017 de las 50 ciudades más violentas del mundo desarrollado por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (Ccspjp), además de Los Cabos, las otras ciudades referidas son Acapulco (Guerrero), La Paz (Baja California Sur), Tijuana (Baja California) y Ciudad Victoria (Tamaulipas).
El informe indica que con una tasa de 111.33 homicidios por cada 100,000 habitantes, Los Cabos fue la ciudad más violenta del mundo en 2017, además de ingresar por primera vez al ranking. En este sentido, pasó de tener una tasa de 61 homicidios en 2016 a 365 en 2017, un incremento de casi 500% en apenas un año.
Con una tasa ligeramente inferior (111.19) se encuentra Caracas, Venezuela, que ocupó el segundo lugar. Con una tasa de 106.63 el puerto guerrerense de Acapulco obtuvo la tercera posición.
De este modo, México, Brasil y Venezuela concentran a las 10 ciudades con mayor número de homicidios por habitante del planeta.
Otras ciudades mexicanas que figuran entre las 50 más violentas del planeta son Culiacán (Sinaloa); Ciudad Juárez (Chihuahua); Chihuahua; Ciudad Obregón (Sonora); Tepic (Nayarit); Reynosa (Tamaulipas) y Mazatlán (Sinaloa).
“Ciertamente en 2017 las ciudades mexicanas estuvieron muy lejos de la tasa de casi 300 homicidios por cada 100,000 habitantes que alcanzó Juárez en 2010, pero el incremento de la violencia es innegable. Y ante la pregunta de por qué ha sucedido esto la respuesta es que se ha hecho lo contrario que en Honduras: no hay una acción para la erradicación sistemática de las milicias privadas de los grupos criminales y se ha permitido que la impunidad llegue a los peores niveles jamás registrados”, señaló el Ccspjp en un comunicado.
Honduras se recupera
El estudio revela una disminución de los homicidios en Centroamérica, principalmente en Honduras, donde la ciudad de San Pedro Sula obtuvo notorio decremento en el número de asesinatos por habitante.
En 2016, San Pedro Sula registró una tasa de 112.09 homicidios por cada 100,000 habitantes, pero en 2017 fue de 51.18: una baja del 54.34% en solo un año. De este modo, la urbe pasó de la tercera posición del ranking de 2016 a la 26 en 2017 (y ocupó el primer lugar mundial en los años 2011 a 2014).
En 2016 en el Distrito Central (Honduras) se registró una tasa de 85.09 homicidios por cada 100,000 habitantes, pero en 2017 fue de 48.00: una baja del 43.59% en solo un año. Con ello pasó de la posición cuarta en el ranking de 2016 a la 35 en 2017.
