Tras el arribo de miles de personas al puerto de Progreso y la fuerte demanda de alimentos y servicios, comerciantes y prestadores, como pocas ocasiones, incrementaron sus precios hasta en un 20 y 30 por ciento.

En algunas pescaderías, restaurantes y comercios aledaños a la zona del malecón del puerto de Progreso, los prestadores de servicios incrementaron sus costos ante la inusitada demanda.

Por lo regular, el kilo de pescado que se vende entre 140 y 150 pesos el kilo, se comercializó en algunos lugares hasta en 180 pesos.

El precio de las bebidas también tuvo un incremento ligero en los establecimientos de comida, sobre todo en los cercanos al derrotero del carnaval del puerto.

De la misma manera, la costante en los restaurantes fue la queja de los visitantes por las porciones de comida, como en el caso de los ceviches, que fueron comercializados entre 150 y 200 pesos la orden, ya que eran muy inferiores a las que comúnmente sirven.

Los refrescos alcanzaron precios de entre 15 y 25 pesos, lo mismo que las aguas purificadas.
Los incrementos se dieron en los comercios y restaurantes situados sobre la calle 76 del puerto, arteria situada a espaldas del malecón.

Se pudo averiguar que la ocupación hotelera en Progreso tuvo un ligero incremento desde el sábado por la noche, sobre todo en los hoteles ubicados en el malecón, como Playa Linda, Los Cabos y Tropical Suites, entre otros.

Por la mañana, en la terminal de autobuses de Autoprogreso, sobre la calle 62, se formaron enormes filas de gente que llegaron hasta la calle 65.