Lugar donde se respira paz y tranquilidad
Cenotillo un lugar lleno de cultura y tradición en donde se respira paz y tranquilidad entre sus habitantes. Se le llamó Cenotillo a esta población, como diminutivo de la palabra cenote o por haber allí algún pequeño ojo de agua.
Sobre la fundación de Cenotillo “Cenote Pequeño”, cabecera del municipio del mismo nombre, se desconocen los datos exactos. En la época prehispánica perteneció a la provincia de los cupules y después de realizada la Conquista, permaneció bajo el régimen de las encomiendas, entre las que se pueden mencionar la de Diego Burgos y Diego López de Ricalde en 1583; y la de José Domingo Pardío en 1744.
Declarada la independencia de Yucatán del reino español y su posterior anexo al resto de la República Mexicana, la población empieza a figurar como cabecera del municipio teniendo bajo su jurisdicción tres pueblos anexos: Tixbacab, Sucilá y Panabá. El 25 de enero de 1886 adquiere el título de villa por decreto, mismo que es derogado 36 años después para volver a la categoría de pueblo. Sin embargo, es posible que después hubiera otro decreto, ya que en 1930 reaparece como villa.
El municipio se localiza a hora y media de la ciudad de Mérida, aproximadamente a ciento cincuenta kilómetros de distancia de la capital, en la región oriente del estado de Yucatán. Colinda con los siguientes municipios: al norte con Buctzotz, al sur con Quintana Roo y Dzitás, al este con Espita y al oeste con Tunkás, Tekal de Venegas y Dzoncauich. Cenotillo ocupa una superficie de 614.43 kilómetros cuadrados habitado por casi cuatro mil personas.
En ese territorio municipal se forman en el subsuelo depósitos comúnmente conocidos como cenotes. En algunos casos los techos de éstos se desploman y forman las aguadas. Actualmente existe una llamada San Pedro. Se han registrado 12 cenotes de los 138 que existen en el municipio de los cuales algunos son Ayin, Catak Dzonot, Itzamná, K´ai-Pech, Mul`Dzonot, Ucil y Laguna de San Pedro.
El palacio municipal de Cenotillo tiene en su torre un reloj que data de 1884 que hasta la fecha funciona y cada hora inunda con el dulce sonido de sus campanadas el centro de la población. Cuenta con dos templos, uno erigido en honor a Santa Clara que tiene un cenote en la parte trasera, y otro en honor a la Virgen de la Natividad, ambos construidos en el siglo XVII. Además, a menos de cinco minutos está la ex hacienda Tixbacab. Asimismo, se pueden apreciar vestigios arqueológicos en la zona denominada Tzebtún.
Una de las celebraciones importantes de Cenotillo se realiza en el mes de agosto del día siete al catorce, en honor a la Virgen de Santa Clara. En cuanto a su economía, Cenotillo se dedica a la pequeña ganadería; en la actualidad cuenta con trescientos cuarenta pequeños ganaderos incluyendo ochenta en la hacienda de Tixbacab.
Por Mauricio Lizama
