A propósito de las relaciones con nuestros hijos
La de ayer
1 . El hijo(a): Mamá por todo me regañas.
Un día de estos me voy a vivir con mis abuelitos.
- Mamá te pedí dinero para mis gastos y me diste muy poco.
Tendré que romper mi cochinito o le pediré dinero a mi padrino.
- Papá, mi maestro me regañó ayer y hoy.
Pero para su cumpleaños no lo voy a felicitar.
- Mami, tengo una amiga en la escuela que me pidió mi foto.
Se la di y sentí que se me salía el corazón.
- Viejo, voy a llevar a Gil al doctor, come poco, duerme poco y en la escuela anda mal.
Vieja ¿tú ya le dijiste a Gil tus observaciones? -Si viejo.
¿Y qué te dijo? -Que lo que yo haga está bien.
- El hijo(a): En esta casa por todo me regañan.
Un día de estos me voy de la casa, alquilo un departamento con varios amigos y se olvidan de que existo.
- Papá, te pedí dinero para mis gastos y me diste una miseria.
Si no me das más, unos amigos me están invitando a ser mesero por las noches.
No digan que no se los avisé.
- Papá, mi maestro me regaña mucho, creo que le caigo mal.
Que no me agarre cruzado, porque le voy a tumbar los dientes.
- Mamá, tengo una amiga en la escuela que creo está embarazada.
Si lo está, por resbalosa. Quiero que me cambien de escuela para alejarme de ella.
- La Mamá le dice al papá: ¿Ya observaste a Gil? -Duerme mucho, come mucho, hay días contentos y días molestos. Y en la escuela anda muy mal.
-¿Y el que te dijo? -Que estoy loca. Creo que es el momento de ver a un psicólogo.
No perder de vista la depresión, que la de hoy no es la misma que la de ayer.
Ayer fue el mejor día de mi vida. Hoy, mañana te digo…
