Hasta hace unos años, la comunicación política era una disciplina que no tenía razón de ser en México. Si alguien quería ganar unas elecciones, no necesitaba hacer ningún tipo de campaña, lo único que tenía que hacer era meterse al PRI.
Hoy, afortunadamente, ya no es así, reflexiona Roberto Trad Hasbun. A partir de la alternancia federal, con el triunfo de Vicente Fox en las elecciones del año 2000, la industria de la comunicación política comienza a tener un sentido y cobrar protagonismo en el país.
Y a una universidad yucateca —la Universidad Modelo— le correspondió el honor de haber detectado por primera vez, más o menos por esos años, la necesidad de formar especialistas en la disciplina, pese a que todavía era prácticamente una desconocida en el país.
“En ese entonces, la industria mexicana del marketing político estaba dominada por estadounidenses y sudamericanos. Hoy México lidera la actividad en América Latina, primero por una razón de tamaño de mercado: tenemos 32 entidades federativas y cada una invierte lo mismo o al menos la mitad de lo que gasta un país en Centroamérica o Sudamérica: nada más como un ejemplo, la economía de Ecuador es del mismo tamaño que la del Estado México y un poco más del doble que las de Yucatán y Quintana Roo”.
Entonces, por el tamaño de las economías y con la cantidad de competencia que hay en México, la industria de la comunicación política avanza a pasos agigantados. “En el año 2000 ni existía y actualmente somos líderes en América Latina”.
Trad Hasbun, parte de esa brillante generación de estrategas que han llevado a México a encabezar el movimiento de innovación, estudio, investigación y aplicación de la comunicación política en América Latina, imparte el primer módulo del Diplomado en Diseño de Campañas Políticas que comenzó ayer en la Universidad Modelo, pionera una vez en estas lides.
¿Qué evolución ha tenido el fenómeno de la comunicación política en México? ¿Cuáles son sus rasgos en la actualidad? ¿Cuál es el impacto de la tecnología en la forma de hacer política? El curso, de 100 horas de duración, se propone revisar y analizar sus indicadores y su evolución, desde su debut hasta lo que se avecina con los próximos comicios.
Al diplomado se han inscrito 27 personas que “seguramente estarán involucrados en el proceso electoral que arrancará oficialmente en septiembre”, dice el Dr. Carlos Sauri Duch, director de la casa de estudios.
Hay investigadores, periodistas, maestros y alumnos egresados de la misma universidad en el grupo. “Y encuentro que el curso ha despertado el interés de líderes políticos que enviaron gente de su equipo. Y no me refiero solamente a políticos yucatecos, hay por ejemplo cuatro o cinco alumnos que vienen del PRI de Campeche. También hay del PAN y PRI yucatecos”, comenta el Mtro. Irving Berlín Villafaña, director del diplomado.
“Me parece que los partidos tienen la obligación de formar a sus cuadros y este tipo de seminarios, que generalmente sólo se hacen en Estados Unidos o en la capital del país, representan una gran oportunidad”.
