No hay para cuando concluya la huelga en la UADY.
Con fuertes consignas plasmadas en pancartas, cientos de maestros, trabajadores y alumnos de la UADY recorrieron en silencio la Av. Montejo.

El llamado fue claro.
De blanco y sin gritos, sin «chistar».
Parte de la comunidad universitaria respondió en apoyo a los huelguistas, que este miércoles cumplen 14 días con banderas rojinegras en cada espacio de esa institución.
Partieron del parque de Santa Ana y de ahí para el norte por Paseo de Montejo.
Conforme lo previsto, jóvenes y adultos sólo elevaban cartulinas y lonas que pedían salarios justos.
En el largo recorrer, no faltó el caos vial y los vendedores de a pie que aprovechaban el relajo.
Al frente de la marcha resaltaban las fotos de Felipe Carrillo Puerto y del mismísimo y polémico Efraín Calderón Lara (a) «El Charras», fundador del sindicato universitario.
Era la media pasada de las cuatro cuando empezó la llamada marcha del silencio.
El contingente vestido de blanco bien organizado.
Al frente las letras azules y doradas formaban las siglas de la Asociación Única de Trabajadores Administrativos y Manuales de la UADY, todo en orden y total caso omiso a los infiltrados.
Llegaron al remate de Montejo, pasaron frente a las casas Gemelas y palacio Cantón, el monumento a Justo Sierra y después al Monumento a la Patria.
Por allá venían como apretando quijadas para no descomponer el cuadro.
Ya en el Monumento a la Patria, su líder, Sofía del Socorro Ayil Sierra, tomó el micrófono:
«Esta lucha no todos la entienden, pero es por la justicia económica y la reivindicación del trabajo y de los derechos y las conquistas sindicales que tenemos los socios de la Autamuady».
Un discurso de tres cuartillas en el que subrayó que con la marcha no buscaban el enfrentamiento. «Es la única vía que tenemos para defender nuestros ingresos».
Después se rompió el silencio; se alzó la voz a favor de la AUTAMUADY y del movimiento, a pesar de que mañana se quedará sin cobrar quincena.

Por Héctor Moreno.