A Walt Whitman
Por Rafael Aguilar / Mayo 2019
A los veinte
En mi vida reinaba
la intuición
y el instinto
impetuoso
abarcable
omnisciente
A más de sesenta
Mi vida sabia
la gobierna
el miedo
y la duda
en tiempo aciago
Con los años
la rueca
gira el tiempo
dejándonos
sin nosotros mismos
desafiando
a la suerte
del tedio
Al fin y al cabo
somos muchos
en uno mismo
los otros somos
a la vez
origen y destino
métricas del universo
si las posee
con propósitos
inasequibles
y veleidades
enredadas
en grumo frágil
de identidad
con levedad
de bruma marina
Arcilla y palabras
somos
hasta los huesos
memoria laberíntica
sueños encriptados
en subrepticias
realidades a modo
¿Y el destino?
¡Ficción!
impregnada
hasta la médula
solo de Fe
El Poeta dice…
“Me celebro y me canto a mí mismo.
Y lo que yo diga ahora de mí, lo digo de ti,
porque lo que yo tengo lo tienes tú
y cada átomo de mi cuerpo es tuyo también.
Vago… e invito a vagar a mi alma.
Vago y me tumbo a mi antojo sobre la tierra”
Walt Whitman
