Mérida, Yucatán, a 03 de junio de 2013.- A pesar de su corta edad, apoyos limitados y condiciones de desventaja en entrenamientos, la adolescente Victoria Mishell Mena Cabrera se impuso a deportistas de estados potencia en la prueba individual de tiro deportivo y conquistó la medalla de oro para Yucatán en la Olimpiada Nacional 2013.

Con promedio escolar superior a 9 en el primer grado de secundaria en la escuela “Gonzalo López Manzanero”, la medallista de oro también contribuyó a que la selección yucateca obtuviese dos preseas de bronce en la competencia por equipos.

El mérito de Victoria Mishell, de 13 años de edad, destaca por varios motivos:

La pistola de aire comprimido que usa para entrenar tiene que ser compartida entre varios compañeros suyos, esto debido a la falta de equipamiento para la práctica de este deporte en Yucatán.

Su entrenador, Román Antonio Rivera Vidal, tuvo que rellenar la cacha de la pistola con una plastilina especial para que se adapte al tamaño de sus manos, lo cual le da una apariencia artesanal al equipo.

La campeona entrena en el Complejo Deportivo de La Inalámbrica en condiciones muy distantes a las que prevalecen en una olimpiada nacional, pues han tenido que adaptar sus prácticas en una bodega cerrada en el que los blancos son figuritas de cartón de carpetas que ellos mismos recortan.

En una competencia de nivel, los blancos son metálicos con un tamaño promedio de tres centímetros.

Por si fuera poco, es su propia familia la que tiene que comprar los diábolos que dispara en sus entrenamientos.

Por todo lo anterior, a Victoria Mishell el triunfo obtenido en días pasados en Guadalajara, Jalisco, le sabe mucho más que al oro, pues desde antes de competir con las mejores atletas del país en esta disciplina, ya había vencido diarios y numerosos obstáculos.

Su tímida sonrisa de adolescente se combina con temple al hablar de sus logros y de sus aspiraciones futuras de la mano de su entrenador, así como de su inseparable acompañante en cada una de las competencias: su abuelita materna Luz Angélica Díaz Negrón.

Fue a la edad de 8 años cuando la campeona comenzó a practicar tiro deportivo gracias a la influencia de su tío Enrique Antonio Cabrera Díaz, quien también destacó en competencias nacionales gracias al cuidado e impulso de su madre Luz Angélica.

Aunque a esa edad calificó para competir en una olimpiada nacional, no pudo asistir precisamente por sus escasos años.

Sin embargo, persistió en sus entrenamientos hasta desarrollar un envidiable pulso a la hora de accionar el gatillo.

Motivos familiares le impidieron entrenar durante un año, pero su amor por este deporte le hizo retomarlo hasta calificar para ser parte del seleccionado yucateco en la Olimpiada Nacional 2013.

La sede fue Guadalajara, Jalisco, el único estado del país que cuenta con infraestructura especializada para la práctica de tiro deportivo y en el que los atletas –al igual que como ocurre en Guanajuato- reciben gran respaldo gubernamental y patrocinios privados para competir en condiciones de excelencia.

En ambas entidades, cada deportista en la prueba de tiro deportivo posee su propia pistola cuyo precio oscila entre los 25 mil y 33 mil pesos.

En Yucatánm se recuerda la experiencia de los hermanos Nava tan sobresalientes como Victoria Mishell, que por la falta de apoyos locales cedieron a la tentadora invitación para irse becados por el gobierno de Guanajuato.

Ahora conquistan toda clase de premios en nombre de dicho entidad e incluso forman parte del selectivo nacional en tiro deportivo.

Con su pulso de francotiradora, Victoria Mishell está lista para transitar hacia mayores retos tanto en competencias nacionales como internacionales.

Desea que su contribución en el medallero para Yucatán en la Olimpiada Nacional 2013 mueva a las autoridades y empresarios a impulsar más la práctica del tiro deportivo en la entidad, para que sean más las niñas y niños que se sumen a su práctica y desarrollen una niñez y juventud sana.